Un encuentro largo, que el titular español, Luis Planas ya avanzaba complejo, especialmente en lo que respecta a la obligación de los buques de devolver al mar los ejemplares capturados de manera accesoria.
El interés de España se centraba principalmente en la cuota pactada para las capturas de merluza en el cantábrico y también en evitar que la flota española tenga que cesar su actividad por la actuación de desembarque.
Uno de los objetivos de España era fulminar el 14% de reducción en las capturas merluzas en Cantábrico y Golfo de Cádiz que planteaba la comisión y finalmente se ha conseguido mantener la misma cuota que en 2018, permanecerán en las 5.924 toneladas. En conjunto, el ministro Luis Planas considera que "el objetivo está conseguido".