El Consejo de Ministros aprobó este martes la nueva subida del salario mínimo interprofesional (SMI) que sitúa en 1.184 euros brutos mensuales en 14 pagas. Por primera vez, los perceptores del SMI tendrán que tributar por el IRPF, después de que el Ministerio de Hacienda decidiera no ajustar el mínimo exento.
Hacienda defiende esta decisión porque ya se aprobó la mayor rebaja para rentas medianas y bajas. Así, el umbral mínimo exento se mantiene en 15.876 euros anuales, la misma cantidad que en el año anterior, mientras que con la subida del SMI para 2025, el total anual pasa a ser de 16.576 euros.
Que el SMI vaya a tributar por el IRPF supone que los trabajadores que lo perciban cobrarán 28,6 euros más al mes, en vez de los 50 euros que prometió el Gobierno. A lo largo del año, el total de la retención será de 300 euros en 14 pagas.
¿Estoy obligado a hacer la declaración de la Renta si cobro el salario mínimo?
Por otro lado, las personas que cobren el SMI no están obligadas a presentar la declaración de la renta. Esto se debe a que la cuantía del salario mínimo para 2025 es de 1.184 euros al mes, lo que suma 16.576 euros anuales, por debajo del umbral de 22.000 euros fijados por la Agencia Tributaria para la obligación de declarar.
Sin embargo, hay situaciones en las que puede ser conveniente o necesario hacer la declaración de la renta si cobras el SMI:
- Si recibes ingresos adicionales de otro pagador o si, por alguna razón, te han aplicado retenciones más altas de lo debido, en cuyo caso podrías tener derecho a la devolución de parte de la retención.
- Si resides en comunidades autónomas donde el tramo autonómico del IRPF permite recuperar parte de lo retenido debido a la diferencia entre lo que se retiene y lo que finalmente se paga.
