INTELIGENCIA ARTIFICIAL

La Inteligencia Artificial revoluciona el sistema educativo: ahorra tiempo, pero preocupan sus riesgos

Hoy en día, el 80% de los estudiantes utiliza esta tecnología que va a dejar obsoletos los planes de estudios y que obliga ya replantearse los sistemas de evaluación. La IA ahorra tiempo en la preparación de las clases y permite ofrecer una educación personalizada a los alumnos, aunque puede reducir la creatividad y las capacidades expresivas.

Patricia Gijón

Madrid | 31.05.2024 15:52

La inteligencia artificial empieza a revolucionar y a transformar las aulas para profesores y alumnos en prácticamente todas las etapas educativas. La IA es cada vez más necesaria para mantenerse al día en un entorno digital que puede mejorar la enseñanza, pero que no está exenta de riesgos y desafíos que obligan a revisar enfoques tradicionales educativos.

Ocho de cada diez estudiantes españoles han utilizado herramientas de inteligencia artificial para hacer los deberes. También, cerca de un 70% de profesores y padres han experimentado con esta tecnología, según el informe "El Impacto de la IA en la Educación en España" elaborado por Empantallados.com y Gad3. Un fenómeno, según el presidente de la consultora, Narciso Michavila, que no se puede frenar.

¿Para qué usan la IA los estudiantes?

Los alumnos la utilizan para realizar trabajos, como complemento a los contenidos de las materias, y para estudiar y preparar exámenes. ChatGPT es la herramienta más utilizada, la más popular, recibe 1,6 millones de visitas al día. Supera en España al Rincón del Vago, una página web de intercambio de apuntes y trabajo. Chatbots que ayudan al estudio de las "mates", crean textos, imágenes, y responden dudas, aunque aún están llenos de imprecisiones y como cualquier humano se equivocan.

Es una nueva era de aprendizaje que empieza a despegar en los últimos cursos de la educación obligatoria, aunque no dentro de las clases.

Ahorro de tiempo para los profesores

Una tecnología que ayuda a Óscar Bethancourt, profesor de filosofía y experto en competencias digitales del colegio Calasancio, a personalizar las tareas y reducir burocracia: "se trata de una herramienta de apoyo, un copiloto para mejorar y hacer más ilustrativas las lecciones". El ahorro de tiempo a la hora de preparar las clases es significativo: "lo que antes podía durar en torno a mes, con ChatGPT y usando los prompts, las preguntas adecuadas, puedo reducirlo a una hora, lo que significa que la capacidad de producción es máxima, de un 150% respecto a cómo la tenía antes".

¿Es posible detectar los trabajos que se hacen con IA?

"Se nota muchísimo cuando el alumno realiza sus propios trabajos o los copia" señala Bethancourt. "Los profesores hacemos un seguimiento continuo y evaluamos de otra manera algunos trabajos". Ahora se examina más su capacidad de análisis, como han realizado las preguntas y si hay dudas mejor apoyarse en las presentaciones orales.

Riesgos para la creatividad y la redacción

A pesar del creciente uso de la IA en la educación surgen inquietudes significativas. El 83% de las familias y el 90% de los profesores expresan su preocupación por las políticas de privacidad y el manejo de datos personales por parte de esas herramientas, que los jóvenes en muchos casos ni siquiera saben.

Los expertos no descartan que en el futuro pueda reducir la capacidad de los estudiantes en algunas competencias. "Todo lo que tenga que ver con la redacción y la creatividad puede sufrir un impacto negativo, aunque también puede aumentar su capacidad de análisis" como apunta Enrique Puertas, profesor de IA y Big Data de la Universidad Europea, que descarta en cualquier caso utilizarla para corregir exámenes.

La IA abre nuevos horizontes, pero hay que garantizar los intereses de los estudiantes. La UNESCO propone tres líneas de actuación que pasan por proteger la privacidad, leyes de copyright y definir los límites para usarla.

El uso de la IA se dispara en la universidad

El uso de la inteligencia artificial es menor en la escuela obligatoria, aún falta camino por andar y sobre todo más formación al profesorado. Al llegar a la universidad la utilización de esta tecnológica se expande. En la universidad las herramientas de inteligencia artificial son más específicas. Se emplean para comparar artículos científicos, visualización de datos, generar imágenes y temas de investigación con referencias y mejor si son gratuitas.

Nadie sabe cómo serán las clases del futuro, pero todos coinciden en que el entorno será digital. Pese a todo, los expertos no creen que se puede renunciar a la IA en las aulas, teniendo en cuenta el escenario laboral que les espera. Ya no basta con tener idiomas, la tecnología está muy demandada, faltan profesionales y será clave para ser más competitivos y encontrar empleo.