En ocasiones, renunciar a una herencia puede ser la mejor decisión. Y es que, estas pueden provocar el fin de una relación familiar o el inicio de un camino que conduce a la ruina económica, ya que, al aceptar la sucesión del patrimonio, uno no solo asume los bienes del heredero, sino que también debe de hacerse cargo de toda clase de deudas y cargas que tenga, además de tener que pagar el Impuesto de Sucesiones.
¿Se puede renunciar a una herencia?
La renuncia a la herencia sí es posible. En este acto, la persona llamada a la sucesión declara que rehúsa de la herencia y rechaza tanto las deudas como los bienes.
Cabe destacar que este hecho es irrevocable, es decir, si se rechaza una herencia, la persona heredera no podrá recular en su decisión. Por ello, se recomienda consultar con un abogado experimentado en herencias y sucesiones que informe y aconseje sobre la mejor de las soluciones existentes a tomar.
Generalmente, para decir ‘no' al legado bastará con comparecer en notaría y renunciar. Para ello, hay que presentar los siguientes documentos:
- DNI del heredero que repudia la herencia
- Testamento o Acta de declaración de herederos abintestato
- Certificado de defunción
- Certificado de últimas voluntades
Dos tipos de renuncia
Cabe destacar que existen dos tipos de renuncia a la hora de declinar una herencia:
- Renuncia pura y gratuita: El heredero renuncia a la herencia sin testamento, no lo hace en favor de nadie, sino que directamente pasa al sustituto que prevé el testamento. Si no hay testamento al resto de coherederos.
- Renuncia a beneficio de alguien: La persona heredera puede renunciar a una herencia en favor de otro heredero. En esta ocasión debe de pagar dos impuestos: uno por heredar (impuesto de sucesiones) y otro por donar (impuesto de donaciones).
Cuál es el plazo para renunciar a una herencia
Los artículos 1004 y 1005 del Código Civil establecen los siguientes plazos para renunciar a una herencia:
- No se puede ejercitar la renuncia hasta pasados 9 días desde la muerte del causante.
- El Notario fijará un plazo no superior a 30 días para la aceptación de la misma. Pasado dicho tiempo, se entenderá por aceptada la herencia.
Finalmente, es importante saber que no es posible rechazar una herencia antes del fallecimiento de la persona, así como tampoco se puede renunciar a una parte de la herencia y a otra no.
Ante cualquier duda sobre herencias, es recomendable estar asesorado siempre por un buen abogado especialista en Herencias y Sucesiones.