A falta de conocer las cifras oficiales del mes de marzo que hacen referencia a las reservas hoteleras y el gasto en el sector de la hostelería, todo apunta a que no se puede hablar de cifras de récord como inicialmente estaba previsto. El responsable de este ligero frenazo es el temporal Nelson que ha azotado la península durante los días de vacaciones de Semana Santa, que ha provocado que muchas personas hayan optado por cambiar de planes a última hora, rebajando así las expectativas previstas para estos días.
Lo reconocía esta mañana el propio ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, que a pesar de todo, hacía un balance global muy positivo, reconociendo que el mal tiempo ha supuesto algunas afectaciones muy localizadas. Sin embargo, el ministro señala que esto no impedirá que se pueden cumplir los pronósticos avanzados por el ministerio que apuntan a un primer cuatrimestre del año en el que se batirán récords en el sector turístico. Y es que se prevé, que en estos cuatro primeros meses del año lleguen a nuestro país, más de 25 millones de turistas que dejarán un gasto en este periodo de más de 32.000 millones de euros.
Unos datos, que para el ministro Hereu, ponen de relieve que lo que antes conocíamos tradicionalmente como “temporada baja” del turismo está mostrando una gran fortaleza, algo que contribuye a desestacionalizar el turismo, y que cada vez el concepto de temporada baja y temporada alta, termine por diluirse más.
El balance de los hoteleros de Semana Santa
También la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) ha hecho este miércoles balance de lo que ha supuesto esta Semana Santa, en la que en general se han registrado unos buenos niveles de ocupación, pese a la mala climatología. Por eso, la patronal reconoce que los datos de cierre de estas fiestas se sitúan por debajo de los previstos en prácticamente todo el territorio nacional, debido al mal tiempo, que ha tenido como consecuencia cancelaciones sobre las reservas que ya se habían realizado.
Los descensos en las reservas con un mayor impacto se han registrado sobre todo en el litoral andaluz y en las islas Baleares, donde los datos de ocupación se han situado entre un 10 y un 20% menos respecto a la Semana Santa del año anterior.
La Comunidad Valenciana, Galicia, Ciudad Real, Sevilla o Cáceres, son algunas de las ciudades en las que este descenso se ha producido de una forma más moderada, mientras que la otra cara de la moneda es Madrid, donde se han superado las expectativas por encima de las previsiones.
