En 11 comunidades autónomas

Macrooperación de Hacienda contra la economía sumergida en productos chinos

La Agencia Tributaria está realizando registros en más de 60 naves de polígonos industriales de 11 comunidades autónomas en una macrooperación contra la economía sumergida entre distribuidores de productos chinos.

ondacero.es

Madrid | 08.06.2017 12:07

La Policía registra una de las naves en una macrooperación de Hacienda contra el fraude en productos chinos
La Policía registra una de las naves en una macrooperación de Hacienda contra el fraude en productos chinos | Agencia EFE

Más de 300 funcionarios de la Agencia Tributaria, repartidos en distintos departamentos del organismo como inspección, equipos de fraude organizado de la ONIF, unidades de auditoría informática y de vigilancia aduanera, están realizado registros que se extenderán a lo largo de todo el día de hoy, y en paralelo se están llevando a cabo actuaciones inspectoras sobre varias decenas de sociedades y sobre algunos de los socios o administradores de dichas empresas.

Esta nueva operación es la quinta que realiza la Agencia Tributaria sobre productos chinos sin declarar, tras las realizadas en 2013, 2014 y 2016. Precisamente la llevada a cabo en noviembre de 2014 en Madrid, bajo el nombre de operación 'Juguetes', es la que ha permitido iniciar las investigaciones de la nueva actuación realizada este jueves en los polígonos industriales de toda España.

En aquella ocasión, la Agencia Tributaria, con la participación de la Fiscalía Anticorrupción, desmanteló una organización internacional dedicada a la importación y comercialización de mercancías originarias de China, responsable de la comisión de múltiples delitos contra la Hacienda Pública, contrabando, blanqueo de capitales, pertenencia a organización criminal, falsedad en documentos oficiales y mercantiles y contra la propiedad industrial e intelectual. El importe total del fraude fiscal cometido superó los 100 millones de euros.

La organización importaba mercancías originarias de China para introducirlas en la Unión Europea, declarando valores en aduana inferiores a los legalmente establecidos, así como no declarando íntegramente las ventas interiores de las mercancías, defraudando de esta manera a la Hacienda Pública tanto en los aranceles de importación como en el IVA y en el Impuesto sobre Sociedades.