De este modo, la tasa de morosidad de la banca española ha conseguido situarse por debajo del umbral del 8% por primera vez desde enero de 2012, según los datos provisionales hechos públicos este jueves por el Banco de España. En total, los créditos dudosos descendieron hasta 97.694 millones de euros en el último mes de 2017, desde los 101.679 millones de euros correspondientes a noviembre.
Esta cifra incluye el cambio metodológico en la clasificación de los Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), que desde enero de 2014 han dejado de ser considerados dentro de la categoría de entidades de crédito. Sin incluir los cambios metodológicos, la ratio de morosidad se situaría en el 8%, puesto que el saldo de crédito fue de 1,221 billones de euros en diciembre al excluirse el crédito de los EFC.
En cualquier caso, la tasa de morosidad se situó 5,81 puntos porcentuales por debajo de el máximo histórico marcado en diciembre de 2013, cuando se colocó en el 13,6%. El crédito total del sector descendió un 0,38% en diciembre en relación con noviembre, hasta los 1,254 billones de euros, mientras que en términos internanuales cayó un 1,71%.
En el mes de diciembre, las entidades financieras redujeron hasta 58.906 millones de euros las provisiones, lo que supone una rebaja de 2.273 millones respecto al mes anterior. Un año antes, este 'colchón' se situaba en 68.459 millones de euros.
Según el analista de XTB, Javier Urones, la caída de la tasa de morosidad responde a la mejora económica que está experimentando España, pero explica que este indicador mejora más despacio que otros como consecuencia de que el volumen de crédito nuevo "apenas crece" por las "fuertes restricciones" que establecen las distintas entidades de crédito. "Esperamos que la continuidad de la mejora económica y laboral en España y una mayor facilidad de crédito de las entidades ayuden a que esta variable económica continúe reduciéndose durante todo este año", apunta el experto.