Nadia Calviño, Ministra de Asuntos Económicos de España, quiere ser la nueva presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI), y también quiere seguir gestionando la política económica de nuestro país. En un acto en Cádiz, Calviño ha afirmado que su hipotética elección como dirigente del banco europeo no interferiría "en absoluto" con su rol de vicepresidenta primera del gobierno, y que Pedro Sánchez "ha expresado su confianza" en ella para repetir su rol en un posible futuro gobierno del PSOE.
Sobre su propuesta para presidir el BEI, que se dio a conocer ayer, Calviño ha afirmado que se trata de "un honor" y que, "dado el calibre del resto de candidaturas" solo ella "tenía las máximas opciones de éxito" en la elección. En enero de 2024, coincidiendo con la presidencia española de la Unión Europea, se renovará esta institución que Calviño ha descrito como "estratégica para España y para Europa", y que posee grandes competencias sobre la financiación de entidades tanto públicas como privadas en materias como la transformación ecológica o la reindustrializaicón.
La elección, en un mes
Sin embargo, para mediados de septiembre ya se conocerá la identidad del futuro presidente del BEI, pues los ministros de Finanzas de todos los países de la Unión se decantarán por uno de los candidatos en una reunión que tendrá lugar en Santiago de Compostela entre los días 15 y 16 de septiembre.
Desde su fundación en 1968, al frente del Banco han estado 7 presidentes, "todos hombres y ningún español", ha recalcado la vicepresidenta Calviño, que considera que la presidencia del BEI consolidaría la tarea de conseguir que España tenga "una voz fuerte y el respeto" de los otros países europeos.
Calviño ha querido reivindicar el papel de nuestro país como "cuarta economía de la Unión Europea", al mismo tiempo que ha afirmado que el gobierno seguirá combatiendo el impacto de la inflación - situada en un 2,3%- manteniendo la bajada del IVA o hasta el final del año o eliminando el impuesto sobre los productos de primera necesidad.
Al encontrarse en la provincia de Cádiz, la vicepresidenta en funciones ha adquirido el compromiso de "mejorar las infraestructuras de Andalucía". La vicepresidenta ha hecho un guiño a la Junta de Andalucía, presidida por el popular Juan Manuel Moreno, afirmando que la solución para mejorar el tráfico en la AP-4 - que conecta Sevilla y Cádiz- pasa por la intervención del Gobierno autonómico. El Gabinete nacional eliminó el peaje de esta concurrida vía, que ha visto su afluencia notablemente incrementada; Calviño ha mencionado la posibilidad de mejora la circulación implementando un "carril reversible" en la vía.