Desde el arranque de la guerra en Ucrania el pasado 24 de febrero, con la invasión de las tropas rusas, el precio de la electricidad no ha dejado de subir hasta niveles nunca vistos. De hecho, este agosto ha cerrado convirtiéndose en el mes más caro de la Historia con un precio medio de 307,8 euros el megavatio hora (MWh), según los datos proporcionados por el Mercado Ibérico del Gas (Mibgas)
Desde mayo, que cerró el mes en 187,11 euros/MWh el precio medio de la electricidad ha aumentado en más de 120 euros. Respecto al mes de julio se ha encarecido un 20%, que finalizó con una media fue de 258,1 €/MWh. Este incremento se ha producido a pesar de los constantes esfuerzos del Gobierno de Pedro Sánchez por intentar reducir el impacto sobre los ciudadanos y empresas.
Una de estas medidas tomadas por el Ejecutivo es la conocida como "excepción ibérica", que el pasado 8 de junio, la Comisión Europea autorizó a España y Portugal su aplicación. Esta excepción permite al Gobierno luso y al español poder topar el precio del gas a los 40 euros / MWh.
Y aunque los datos del Mibgas indican que si no se hubiese aprobado la excepción ibérica, la media de agosto habría sido de 376,69 euros /MWh y en el mercado mayorista hubiese sido un 22,38% más caro, los consumidores continúan viendo cómo el precio de la electricidad continúan subiendo día tras día.
¿Por qué sigue subiendo el precio de la electricidad?
Según explica la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) apunta que estos tres factores son los que hacen que el precio de la luz siga subiendo a pesar de la entrada en vigor de la "excepción ibérica".
- La demanda eléctrica ha seguido siendo elevada durante los meses de verano por efecto de la ola de calor, que ha provocado que los ciudadanos pongan el aire acondicionado y ventiladores. "Sin olvidar que se está generando más electricidad ya que se está exportando a Francia el máximo de capacidad que permite la red (que no es mucha). Ese incremento del consumo se ha mantenido durante todo el mes de julio", indica la OCU.
- El precio del gas continúa subiendo en el mercado, por lo que se vende a un mayor precio a las compañías gasistas a las que luego hay que pagarles la compensación.
- Además, "las centrales de gas incrementaron su producción de forma importante hasta representar el 31% del total del mix energético, cuando los valores medios suelen situarse por debajo del 15%". Hechos a los que se suma "la reducción de la generación hidráulica, que ya se arrastraba de meses anteriores, junto a un importante descenso de la generación eólica y fotovoltaica durante el mes de agosto".
Por ello, la OCU insiste en que "el resultado es que ha habido mucho gas que compensar y a un precio elevado. Esta situación diluye mucho los efectos positivos de limitar el precio del gas".
¿Sirve de algo la excepción ibérica?
Aún así, desde la OCU aseguran que topar el precio del gas "sí ha conseguido limitar el precio de la electricidad en el mercado mayorista, pero a un coste muy superior al previsto, por lo que no solo no hay ahorro visible, sino que la factura finalmente se ha vuelto a encarecer".