La alarma saltaba este miércoles cuando Credit Suisse sufrió un desplome de sus acciones superior al 20% al tiempo que anunciaba una oferta de Credit Suisse International para recomprar ciertos títulos de deuda senior por hasta aproximadamente 3.000 millones de euros.
La noticia se sumaba a la conocida el viernes pasado y que tenía como protagonista al Silicon Valley Bank (SVB), entidad americana que colapsó provocando la caída mundial de las bolsas y la aparición del fantasma de Lehman Brothers, cuya quiebra supuso el inicio de la crisis financiera de 2008.
Caída mundial de las bolsas
El desplome del banco suizo también repercutió negativamente en las bolsas mundiales, que vivieron un efecto contagio. Al cierre, Milán cayó el 4,61%, Madrid, el 4,37%; Londres, el 3,83%; París, el 3,58%; Fráncfort, el 3,27%; y el índice Euro Stoxx 50, que agrupa a las mayores cotizadas, el 3,46%. Los mayores descensos en lo que va de año en todos los casos.
Wall Street, por su parte, cerró en territorio mixto y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, perdió un 0,87% en una nueva jornada volátil en la que el parqué neoyorquino se vio afectado por la caída de las acciones del Credit Suisse. El principal índice de la Bolsa de Tokio, el Nikkei, cayó un 2% en la apertura de la sesión de este jueves, contagiado también por la caída de los mercados europeos ante el temor de una crisis financiera tras el colapso de dos bancos estadounidenses.
Sin embargo, en la apertura de este jueves, parece que las bolsas se han recuperado. El Ibex 35 ha iniciado la sesión con una subida del 2,11%, lo que ha llevado al selectivo a recuperar la cota de los 8.900 puntos. Milán ha cotizado con subidas (1,89%), al igual que París (1,65%); el DAX alemán (1,56%); y Londres (1,29%). El anuncio de Credit Suisse de solicitar ayuda al BNS para reforzar su liquidez también ha impactado positivamente en la entidad suiza, ya que sus acciones han comenzado la sesión de este jueves con un rebote del 32,59%, hasta los 2,25 francos suizos.
¿Qué ha pasado con Credit Suisse?
Pero, ¿qué es lo que ha sucedido con Credit Suisse y por qué ha tenido tanta repercusión a nivel mundial? Para dar respuesta a esta pregunta, Carlos Alsina entrevista en 'Más de uno' al economista José Ramón Iturriaga, que explica que el desencadenante final fueron las declaraciones del principal accionista de Credit Suisse, el Banco Nacional Saudí, que anunció que no iba a aportar más ayuda financiera para que la entidad hiciese frente a los problemas que llevaba arrastrando desde hacía tiempo.
Sin embargo, Iturriaga considera que las declaraciones se sacaron de contexto porque analizando en profundidad la situación de Credit Suisse, la entidad tiene graves problemas desde hace tiempo.
Credit Suisse tiene tres negocios y sólo gana dinero en uno:
- La banca suiza: banca retail que hace en Suiza donde gana aproximadamente mil millones de euros.
- La banca privada: por este negocio es conocido en el resto del mundo y aquí "ni gana ni pierde", según Iturriaga.
- La banca de inversión en Estados Unidos: es aquí donde pierde "hasta la camisa", según explica Iturriaga, porque paga más de lo que ingresa. La única línea de gasto que tiene es la nómina de sus empleados y le cuesta hacerle frente. "Ahí está perdiendo 3.000 millones de euros recurrentemente", asegura.
"Un problema de falta de rentabilidad y mala gestión"
Por tanto, el economista considera que la entidad lo que tiene es un problema de "falta de rentabilidad", motivo por el cual el año pasado hicieron una ampliación de capital entrando en acción el accionista saudí para darle "la vuelta a la situación". "El problema ha sido que a raíz de lo que pasó en Estados Unidos la semana pasada, el mercado se ha ido al siguiente eslabón débil, que es este, pero en realidad la situación tiene poco que ver", asegura Iturriaga.
"Toda esta situación no tiene nada que ver con una crisis al uso. No es que la gente esté dejando de pagar las hipotecas y eso haya desencadenado la debacle o el desmoronamiento del balance de los blancos. Todo lo contrario: la situación del banco californiano fue una y la del banco suizo es otra bien distinta, pero no es porque tenga un problema de agujero en su balance, que fue lo que pasó en 2008", explica el experto.
Por tanto, "es un problema de falta de rentabilidad y de mala gestión continuada durante muchos años". De hecho, Iturriaga aporta como dato que "los 50.000 empleados de Credit Suisse ganan de media 200.000 euros al año".