La Covid-19, el paro de los transportistas de marzo de 2022, la invasión rusa en Ucrania y unos datos históricos de inflación, entre otros, son algunas de las causas que ha puesto a la economía nacional en un brete durante los últimos años. La más directa -y tangible- ha sido el bolsillo de los españoles que se han visto obligados a afrontar la subida de precios de los carburantes, de la electricidad, de los alimentos y un largo etcétera. Como prueba, un botón: el salario medio ha perdido hasta un 4% de poder adquisitivo en España.
En este contexto, son muchos los hogares que ven complicado reducir el endeudamiento que han acumulado. Para evitar que ese déficit siga creciendo, existe una salida legal: es lo que se conoce como la Ley de Segunda Oportunidad, modificada en 2022. Eso sí, no todos pueden acceder a ella, ya que es necesario cumplir una serie de requisitos.
Condiciones para obtener la Ley de Segunda Oportunidad
La Ley de la Segunda Oportunidad, que está regulada en la Ley 25/2015, de 28 de julio, y en la Ley Concursal, modificada por la Ley 16/2022, de 5 de septiembre, dicta que estas son las condiciones debes cumplir para cancelar tus deudas:
- Ser persona física
- Tanto los particulares como los autónomos pueden acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad, siempre y cuando residan en España. También lo pueden hacer los extranjeros con residencia legal, que tengan la documentación en regla y su principal centro de interés en el país.
- Por su parte, las empresas (personas jurídicas), están sujetas a un 'Concurso de Acreedores'.
- Tener más de 1 acreedor
- Es necesario tener dos o más deudas con diferentes entidades, ya sean bancos, empresas, Hacienda, particulares, proveedores, Seguridad Social…
- Ser insolvente
- Hay que demostrar no tener capacidad para asumir las deudas pendientes. Existen dos tipos de insolvencia (actual: cuando no es la primera vez que el deudor efectúa un impago; inminente: cuando el afectado, que hasta el momento ha llevado sus cuentas al día, asume que no podrá hacer frente a los pagos en un corto periodo de tiempo).
- No tener antecedentes por delitos socioeconómicos
- Si has cometido algún delito socioeconómico en los últimos diez años, no puedes acceder a la Ley de Segunda Oportunidad, salvo que la pena haya sido inferior a los tres años, o que ya hayas cumplido la condena.
- Actuar de buena fe
- No colaborar con el juzgado o engañar a los acreedores al solicitar el préstamo, también impedirá que puedas beneficiarte de la LSO.
- Cumplir con el plazo entre exoneraciones
- No pueden haber pasado más de cinco años entre una solicitud de exoneración y otra anteriormente conocida, a excepción de que la hayas obtenido mediante un plan de pagos, cuyo plazo será de dos años.
Pasos para solicitar la LSO
Una vez hayas comprobado que cumples con los requisitos para ser beneficiario de la Ley de Segunda Oportunidad, debes conseguir un equipo de abogados que te ayuden a recopilar toda la documentación que se necesita para acreditar una situación de insolvencia.
Preparada la demanda, hay que presentarla al Juzgado de lo Mercantil, y así, poder empezar con la fase judicial, en la que nos podemos encontrar con tres tipos de situaciones:
- Exoneración Sin Bienes: esta opción va destinada a aquellas personas que no poseen bienes para liquidar y hacer frente a sus deudas, por lo que se les permite solicitar la cancelación de estas, sin que su patrimonio se vea perjudicado.
- Exoneración con plan de pagos: esta alternativa sirve para que el deudor pueda proteger sus bienes y su vivienda. Después de cancelar parte de sus deudas, puede hacerse cargo del resto por mediación de un plan de pagos a 3 o 5 años.
- Exoneración con liquidación: permite al deudor suprimir todas las deudas pendientes a cambio de liquidar todo su patrimonio.
¿Es posible cancelar todas las deudas?
Es posible cancelar todas tus deudas, pero si las tienes con Hacienda o con la Seguridad Social, solo te van a perdonar, como máximo, 10.000 euros respectivamente. Para abonar la cuantía restante, se realizará un plan de pago. En el caso de las hipotecas, podrás saldar la deuda entregando tu vivienda.
Una vez acogidos a la Ley de Segunda Oportunidad, obtendrás la cancelación de tus deudas durante un periodo de cinco años, a no ser que, por petición de los acreedores, se revise tu caso. Pasado el lustro, todo impago desaparece.
Los beneficios tras la aplicación de la LSO
Estas son las ventajas que tiene acceder a la Ley de Segunda Oportunidad:
- No sólo se paraliza el crecimiento de intereses de tus deudas, sino que también se suspenden los embargos.
- Puedes mantener tus bienes, así como tu vivienda (siempre y cuando no elijas la opción de liquidar tu patrimonio y cancelar todas las deudas).
- Ya no estarás presente en los ficheros de morosos.
- Volverás a disponer de tarjetas de crédito.
Con todo ello, tendrás la oportunidad de empezar de cero y conseguir una mejor salud financiera.
