El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo se reúne este viernes de forma extraordinaria para decidir si amplía a 3.000 millones de euros la provisión urgente de liquidez para Grecia. El objetivo es hacer frente a la creciente fuga de capitales que ha sembrado dudas sobre la posibilidad de que los bancos griegos puedan abrir el lunes.
La falta de avances en la negociación con Grecia planea sobre la reunión que mantienen en Luxemburgo los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea, después de que el jueves fracasara la reunión del Eurogrupo.
A su llegada a la reunión, el ministro español, Luis de Guindos, ha asegurado que España no necesita "planes de contingencia" ante una posible quiebra de Grecia o ante la salida del país del euro, pero sí ha reconocido estar preocupado. Según De Guindos, en esta ocasión el problema iría "más allá de un contagio entre países".
"Esto no es un tema de contagio, como era hace tres o cuatro años, sino algo diferente ya que hablamos del futuro de la zona euro. Nos estamos jugando algo superior, que nos afecta a todos", ha afirmado De Guindos.