La reunión entre el primer ministro griego, Alexis Tsipras, y los dirigentes de las instituciones y los países acreedores terminó sin un acuerdo sobre las propuestas de Grecia, aunque las partes volverán a reunirse en unas horas para tratar de lograr avances.
El vicepresidente de la Comisión Europea (CE) para el Euro, Valdis Dombrovskis, dijo a su llegada a la reunión del Eurogrupo (ministros de Finanzas de la eurozona), que se retrasó por ese encuentro de alto nivel, que se "están haciendo progresos", pero "sigue habiendo cuestiones pendientes" por resolver hasta lograr un acuerdo.
"Estamos en un proceso de negociaciones intensas, estamos haciendo progresos. No hemos llegado aún (a un acuerdo) y vamos a informar a los ministros para que nos den más orientaciones sobre cómo seguir adelante", añadió Dombrovskis.
"Vamos a seguir el trabajo para buscar una solución, que es necesaria y posible", declaró por su parte el comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici.
Tsipras se ha reunido con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker; del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, y del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, así como con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, Dombrovskis, Moscovici y el director gerente del fondo de rescate, Klaus Regling.
Dijsselbloem, Lagarde y Draghi han abandonado también el encuentro con el primer ministro griego para participar en la reunión del Eurogrupo que se celebra al otro lado de una de las principales arterias del barrio europeo de Bruselas.
Después de intercambiar puntos de vista con los ministros, se espera que el Eurogrupo se pare para que los representantes de las instituciones que formaban la troika (CE, BCE y FMI) y Dijsselbloem continúen la reunión a más alto nivel con Tsipras, indicaron a Efe fuentes europeas.
Tsipras, que mañana participará en la cumbre ordinaria de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea, prevé quedarse esta noche en Bruselas, acompañado por el viceprimer ministro griego, Yanis Dragasakis, y el ministro de Estado, Nikos Pappás.