En una rueda de prensa celebrada en la sede de la aerolínea en Dublín, O'Leary pidió disculpas a los miles de viajeros que se verán afectados por esta medida, pero insistió en que apenas afecta al 2 % de todos los vuelos de la compañía, líder en Europa del sector de bajo coste, unos 2.000 trayectos en total.
"No estamos cortos de pilotos. En lo que hemos fallado ha sido en la distribución de las vacaciones. No tenemos suficiente personal en reserva para hacer frente a los trastornos sufridos, como los provocados por los controladores o por la climatología", explicó el directivo.
Según O'Leary, simplemente les faltan pilotos y personal de cabina para sustituir a los que están de vacaciones en septiembre y octubre o para reemplazar a equipos de vuelos, como el que se quedó en tierra en Barcelona (España) el pasado fin de semana "por las tormentas".
En este contexto, dijo el jefe de Ryanair, "tenemos que suspender unos 50 vuelos" diarios durante las próximas seis semanas, "mientras tenemos estos problemas" con las plantillas, para corregir su puntualidad, la cual ha caído hasta en torno al 70 %.
O'Leary señaló que los vuelos afectados forman parte de "rutas muy concurridas" y apuntó que se ofrecerá a los pasajeros "una serie de alternativas".
"Enviaremos correos electrónicos a todos nuestros clientes esta tarde y ofreceremos actualizaciones en las redes sociales", agregó y asumió que se deberán pagar compensaciones económicas valoradas en unos 20 millones de euros.
En un comunicado, la aerolínea ha precisado los vuelos que se anularán entre el 21 de septiembre y el 31 de octubre, lo que podrá verse también en su página web.
De acuerdo con la nota, los aeropuertos desde los cuales se suspenderá una o como máximo dos "líneas de vuelo" son Barcelona (1 línea de 12), Bruselas Charleroi, Dublín, Lisboa, Londres Stansted, Madrid (1 de 13 líneas), Milán Bérgamo (Italia), Oporto (Portugal) y Roma Fiumicino.
Por otra parte, la Comisión Reguladora de Aviación irlandesa (CAR) indicó este lunes que Ryanair "puede ofrecer a los pasajeros transporte similar hasta su destino final si no hay vuelos alternativos disponibles en la compañía".
"Cuando se pueda llegar a un destino a través de varios aeropuertos -añadió la CAR- Ryanair puede ofrecer un vuelo a un aeropuerto alternativo al reservado originalmente. En ese caso, está obligada a asumir el coste de transferir al cliente al aeropuerto original o a otro próximo aprobado por el cliente".
Respecto a las compensaciones económicas, la Oficina Europea del Consumidor en Dublín recordó hoy que las aerolíneas pueden evitarlas si demuestran que los vuelos han sido cancelados por circunstancias extraordinarias o ajenas a su control, caso que no es el de Ryanair.