Preguntado sobre si la entidad realizará algún tipo de provisión por esta sentencia, Guardiola señaló que "estamos tan cerquita de la resolución del Supremo, que cualquier medida que se tenga que tomar la tomaremos con el conocimiento de causa que nos dé lo que pase en unos días", cuando el Pleno de la Sala Tercera del Supremo se reúna el 5 de noviembre.
Guardiola explicó que la norma que establecía que el impuesto lo tiene que pagar el beneficiario de la transacción es de 1995, "ha estado funcionando con normalidad durante 22 años" y los fallos del Supremo que se han dado han dictado jurisprudencia "confirmando el criterio del reglamento hasta el otro día".
"Vamos a esperar" hasta el 5 de noviembre, indicó Guardiola, quien añadió que será entonces cuando se decidan las políticas comerciales y si hay algún efecto económico.
El consejero delegado señaló que hasta el momento, el Sabadell ha seguido operando "con normalidad", con los mismos precios y siendo el cliente el que paga el impuesto, pero reconoció que hay "más preocupación" y "preguntas" entre los usuarios.
No encarecer las hipotecas
Preguntado sobre la posibilidad de que el coste de las hipotecas se encarezca para los clientes, Guardiola afirmó que "no veo por qué las hipotecas van a ser más caras". Si el Supremo confirma su criterio respecto a que es el banco y no el cliente quien debe pagar el impuesto, "cada banco se moverá, si eso pasara, en direcciones distintas".
En cualquier caso, añadió que "lo lógico es que se repercuta o se trate de repercutir". "Que al final, en términos del coste, para el cliente haya alguna ventaja final, no creo que eso sea un factor que haga caer al mercado hipotecario", aseveró.
Además, apuntó que su impresión es que el ritmo de firma de hipotecas está siendo "parecido al normal", pese a la situación judicial.
Imagen de la banca
Respecto a la relación de esta sentencia con la imagen de la banca que existe en la sociedad, el consejero delegado del Sabadell reflexionó que "la banca ha sufrido una época con daños reputacionales, fruto, sobre todo, de malas praxis en algunos de los jugadores, que al final contaminan un poquito al sector".
Consideró que "la gente está cabreada con la banca en general cuando el lío lo causaron las cajas de ahorro, pero luego la gente en general tiene buena relación con su banco, una magnífica relación con su oficina".
En cualquier caso, dijo que la reputación del sector es "mejorable" y "los primeros que tenemos que hacer la mejora somos los banqueros y están dadas las condiciones ambientales para que eso se dé".