Transparencia Internacional pide controlar más el BCE y que se prevengan las puertas giratorias
La ONG Transparencia Internacional ha pedido en un informe mayor control público hacia el BCE, una institución que asegura ha estado tomando decisiones políticas sobre la crisis. Asimismo, ha recomendado a la entidad, dejar de formar parte de la 'Troika' y prevenir las 'puertas giratorias'.
Transparencia Internacional ha pedido este martes prevenir los casos de puertas giratorias en el Banco Central Europeo (BCE) mediante el establecimiento de un periodo de transición de dos años para los miembros del Consejo de Gobierno desde que dejan su puesto en la institución hasta que regresan al sector privado.
En un informe titulado "¿Dos caras de la misma moneda? Independencia y responsabilidad del BCE", la organización también propone aplicar esa medida a los funcionarios de alto nivel del banco y recalca que el principio figura en la regulación sobre personal de la Unión Europea (UE) y en el Código de Conducta para Comisarios Europeos que se adoptará próximamente.
El estudio asegura que muchos miembros del Comité Ejecutivo del BCE, que incluye al presidente y vicepresidente de la entidad, han aceptado empleos en compañías privadas de finanzas sin tener experiencia previa en el sector antes de trabajar en el Banco Central Europeo.
Asimismo, solicita poner en marcha un procedimiento transparente para analizar los puestos de trabajo a los que accederán los empleados del BCE tras abandonar la institución comunitaria.
En opinión de Transparencia Internacional, el Comité de Ética del Banco Central Europeo debería realizar esa evaluación, en lugar del Comité Ejecutivo.
Aun así, llama a reformar el órgano ético porque en la actualidad está liderado por un expresidente del BCE y, por tanto, "no resulta tan imparcial como debería", indica el documento.
Además, propone que los miembros del Consejo de Gobierno y, en particular, los integrantes del Comité Ejecutivo, lleven a cabo declaraciones públicas sobre sus intereses y activos.
Para detectar los conflictos de intereses y la corrupción, Transparencia Internacional considera necesaria la actualización del procedimiento que permite a particulares denunciar situaciones internas ilegales, con el objetivo de equipararlo a los mejores modelos internacionales e incluir la opción de mantener el anonimato del informante.
El estudio recuerda que durante 2016 solo dos individuos denunciaron irregularidades en el Banco Central Europeo, lo cual refleja, según sus autores, "la dificultad para crear una cultura propicia para la integridad".
El documento también exige a la institución comunitaria mayor transparencia a la hora de notificar los encuentros de sus empleados con lobistas y, en ese sentido, propone que el BCE se una al Registro de Transparencia de la Unión Europea, donde trabajadores y políticos de la UE dan cuenta de sus encuentros con representantes de empresas y grupos de presión.
Igualmente, llama a convertir en norma la publicación de sus decisiones, recomendaciones u opiniones y, por tanto, a reducir las excepciones a la divulgación de documentos.
Asimismo, Transparencia Internacional pide que el Banco Central Europeo deje de jugar un papel "sustancial" en la Troika (Comisión Europea, BCE y FMI) y que no tenga un rol "formal" en la negociación y monitorización de las condiciones para recibir un rescate.
El estudio solicita que las comunicaciones entre el banco y los Gobiernos nacionales sobre condiciones para aprobar medidas de apoyo monetario sean públicas y estén firmadas por el presidente del Eurogrupo y el Parlamento Europeo.
Por último, sugiere fortalecer el papel de la Eurocámara en el proceso de designación de los miembros del Comité Ejecutivo, así como informar a los diputados sobre las posiciones adoptadas por los representantes del BCE en encuentros internacionales.