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Ni vivienda, ni luz, ni sueldos: las cifras 'micro' que muestran que España no va tan bien

El optimismo de Pedro Sánchez con los datos macroeconómicos, contrasta con la realidad de muchos españoles.

ondacero.es

Madrid |

Ni vivienda, ni luz, ni sueldos: las cifras 'micro' que muestran que España no va tan bien
Ni vivienda, ni luz, ni sueldos: las cifras 'micro' que muestran que España no va tan bien | Europa Press

Pedro Sánchez ha presumido de que la economía española "va viento en popa a toda vela rumbo al pleno empleo en 2027". Lo aseguró en uno de los últimos actos del PSOE, pero la realidad cotidiana para muchos ciudadanos cuenta una historia diferente. El acceso a la vivienda, el encarecimiento de la luz, los salarios estancados y la persistente pobreza infantil ofrecen una visión menos optimista del panorama socioeconómico del país.

Vivienda: un desafío inabordable

La vivienda se ha convertido en el mayor problema para los españoles, según el último Barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). El 28,3% de la población identifica este tema como su mayor preocupación, seis puntos más que en diciembre, alcanzando niveles similares a los de la crisis inmobiliaria de 2008.

Los datos del Observatorio del Ministerio de Vivienda no dejan lugar a dudas sobre el alza de los precios. A cierre del tercer trimestre de 2024, el precio medio del metro cuadrado se situaba en 3.274,60 euros en Madrid y 2.690,50 euros en Barcelona, mientras que en provincias como Valencia y Baleares el incremento interanual llegó al 10%.

El acceso al alquiler también es complejo. Según el informe europeo 'House for All', en Ibiza dedicar el 40% de los ingresos familiares solo permite acceder a viviendas de menos de 30 metros cuadrados, mientras que en ciudades como Barcelona, Madrid o Valencia, ese mismo esfuerzo apenas alcanza para entre 30 y 50 metros cuadrados.

Para quienes deseen comprar, el panorama es aún más desalentador: el estudio indica que en Ibiza y Málaga se necesitan más de 35 años dedicando el 40% de los ingresos para adquirir una vivienda de 100 metros cuadrados. En Alicante, el esfuerzo oscila entre 30 y 35 años, y en Madrid y Barcelona entre 20 y 25 años, según el citado estudio.

El precio de la luz sigue subiendo

El mercado eléctrico tampoco ofrece alivio a las familias. Según datos de la consultora Grupo ASE, el precio mayorista de la luz cerró enero en una media de 96,69 euros/MWh, lo que supone una subida del 30,9% respecto al mismo mes de 2024.

A lo largo del mes se registraron picos de 225 euros/MWh y mínimos de 0 euros/MWh, debido a condiciones climatológicas variables. La demanda elevada por las bajas temperaturas en Europa ha incrementado la generación con gas y carbón, lo que eleva aún más los precios.

Salarios precarios

Los últimos datos de la Encuesta de Estructura Salarial 2022 (publicada a finales de 2024) del INE reflejan una situación preocupante. El salario modal (el más frecuente) se situó en 14.586,44 euros anuales, con un 20,5% de los asalariados ganando entre 14.000 y 19.000 euros al año.

El impacto del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) ha desplazado a una parte de los trabajadores de salarios bajos a ese rango de ingresos, pero la precariedad laboral persiste, con escasas oportunidades de mejora salarial.

Pobreza infantil: una herida persistente

El último informe de la Comisión Europea sobre políticas sociales alerta sobre la preocupante situación de la infancia en España. En 2023, el porcentaje de niños en riesgo de exclusión social subió al 34,5%, un aumento de ocho puntos respecto al año anterior y diez puntos por encima de la media de la Unión Europea.

Catalina Perazzo, directora de incidencia social en Save the Children, advierte que la pobreza infantil en España es "casi estructural". "Invertimos un 1,5% del PIB, muy por debajo del 2,3% que destina la media europea", señala.

Las ayudas sociales, además, no son efectivas para reducir esta desigualdad. "Están mal diseñadas, tienen cuantías insuficientes o presentan barreras de acceso que dificultan que lleguen a quienes más lo necesitan", critica Perazzo.

La persistencia de la pobreza en el trabajo, particularmente entre madres solteras y personas migrantes, agrava aún más el problema.

Aunque el Gobierno insista en los buenos indicadores macroeconómicos, el día a día de miles de familias muestra una realidad bien distinta: dificultades para acceder a una vivienda, precios energéticos disparados, salarios insuficientes y una pobreza infantil que amenaza el futuro de las nuevas generaciones.