En el debate pudo verse a un Alberto Núñez Feijóo, candidato a la reelección como jefe del Ejecutivo gallego, en tono presidencialista intentando trasladar al electorado que solo existen dos alternativas el 12 de julio: la "estabilidad" de un gobierno de mayoría absoluta del PP o una coalición de "diez partidos". En su estrategia de presentarse como el único garante "de un gobierno unido" preguntó en varias ocasiones a los potenciales socios de una coalición de izquierdas si tenían un programa de gobierno conjunto y advirtió que los apoyos a Ciudadanos "son votos perdidos". "Seguimos con la mano tendida", le había dicho previamente al PP la candidata del partido naranja.
Por su parte, el candidato del PSdeG, Gonzalo Caballero, se mostró bastante activo, con constantes acotaciones durante las intervenciones de sus contrincantes e hizo hincapié en el mensaje central que quería hacer calar: "no es lo mismo que gobierne la izquierda que la derecha". Pero fue a Feijóo a quien más veces se dirigió en su intento por presentarse como alternativa presidencial.
Confrontar directamente con Feijóo fue también la estrategia prioritaria de la candidata del BNG, Ana Pontón, quien echó mano en múltiples ocasiones de la fórmula: "si soy presidenta". Pero también llegó a reprochar a su potencial socio del PSdeG que no se refiriese a Alcoa en el bloque sobre política industrial, un desliz que Caballero corrigió en el siguiente área temática.
Por su parte, el cabeza de cartel de Galicia en Común, Antón Gómez-Reino, fue el único que se refirió a un programa conjunto de un hipotético gobierno de coalición de izquierdas, un guante que no recogieron ni BNG ni PSdeG.
La candidata de Ciudadanos, Beatriz Pino, intentó presentar a su partido como bisagra para el PP si Feijóo no revalida su mayoría absoluta y le hizo el trabajo de entrar en el cuerpo a cuerpo contra el BNG, mostrando en un par de ocasiones las papeletas con las que el BNG concurrió a las últimas europeas junto con Bildu y ERC.
El número uno de Vox a las elecciones autonómicas por la provincia de A Coruña, Ricardo Morado Fajardo, fue el único que intervino en castellano en el debate y para dirigirse a él incluso Feijóo cambió a este idioma. Sus intervenciones fueron reiteradas para denunciar la "violencia" que supuestamente sufren los miembros de su partido.
Finalmente, el representante de Marea Galeguista, Pancho Casal, aprovechó sus intervenciones para presentar algunas de las propuestas de su opción el próximo 12 de julio y diferenciarse del "tripartito de Sánchez", en alusión a PSdeG, BNG y sus antiguos socios de la coalición Galicia En Común-Anova Mareas.
Seguro que te interesa...
Voto por correo en las elecciones de Galicia 2020: plazos y cómo presentar