El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha afirmado que su previsión personal es que "el PSOE se mantendrá hasta el final votando 'no' a la candidatura de Mariano Rajoy", por lo que prevé que está legislatura será "muy inestable". De hecho, ha reconocido en el programa Espejo Público que no descarta nuevas elecciones generales "en unas pocas semanas o en un año".
El dirigente socialista ha valorado que "la realidad del mapa electoral que ha quedado es muy diabólica, para torturarnos". Ha incidido en que "aún estamos en un momento muy inicial de las conversaciones" y en que "no hay que ir con muchas prisas porque hay muchos espacios de duda". En cualquier caso, ha advertido de que "una cosa es hablar de la investidura y otra del conjunto de la legislatura" y ha advertido de que "ese gran pacto" que permitiría gobernar "no está en cuestión porque el PSOE ya ha anunciado que votará 'no' a Rajoy". "No sé si las elecciones se van a convocar en unas pocas semanas o en un año, pero es muy dificil una legislatura estable", ha insistido.
Respecto a otras opciones de negociación por parte del PSOE, García-Page ha explicado que ahora se están "marcando las líneas rojas o cuestiones insalvables". "Si hubiera espacio para el entendimiento, que no descarte nadie un pacto entre PSOE y Podemos. Pero, hoy por hoy, a Podemos parece que le importa más su propio interés electoral respecto a Cataluña que desalojar del gobierno a Rajoy, ha comentado. Por eso, ha manifestado que si el referéndum de autodeterminación "es la única condición y es insalvable" por parte del partido de Pablo Iglesias, "es imposible el acuerdo".
"El 20% de votos que tiene Podemos no puede condicionar una reforma constitucional al resto de formaciones políticas", ha añadido el presidente castellano-manchego, que ve aún más complicado el diálogo si se extiende a otras formaciones como ERC. "Un acuerdo sencillo con Podemos es viable, como se ha demostrado en varias comunidades autónomas, pero otra cosas es tener que mezclar todo tipo de posiciones y cuestionando la soberanía nacional. A cualquier precio no estamos dispuestos a gobernar", ha aclarado.
Sin embargo, se ha mostrado impreciso a la hora de explicar cómo los socialistas van "a intentar que no haya segundas elecciones". Aunque ha criticado el mensaje que se lanza a los ciudadanos "si se anteponen los intereses electorales a los institucionales", ha insistido en que "va a ser prácticamente imposible una legislatura de estabilidad" porque en ningún caso el PSOE permitirá un acuerdo con el PP. "Los millones de votos que tenemos dicen que no se pueden apoyar las políticas de Mariano Rajoy", ha valorado.
Preguntado si, en caso de repetirse las elecciones, el candidato socialista seguirá siendo Pedro Sánchez, García-Page ha afirmado que "es mejor no especular".