El veto a Onda Cero se produce tras la noticia que daba a conocer Ismael Terriza de que el partido de Abascal había reconocido en privado -a través de un grupo de Whatsapp- que la decisión de la Junta Electoral Central de excluirles del Debate Decisivo de Atresmedia les beneficiaba, a pesar de que en público mostraban su enfado.
La conversación por Whatsapp la mantuvieron Kiko Méndez Monasterio, la mano derecha de Santiago Abascal, con Manuel Mariscal, el vicesecretario de comunicación de Vox. El mensaje fue reenviado por error a un grupo en el que había más de 100 periodistas.
"Cuando nos pregunte por el debate (aunque sea off the record) trasladamos nuestro gran cabreo porque íbamos a ganar ese debate. Nada de decir que nos venía bien." Y además le apremia para que esa misma orden se la traslade a Juan Ernesto Pfüger, el enlace de vox con los medios de comunicación.