La pasada Semana Santa se ha visto marcada por las lluvias y los cielos grises: sin embargo, el experto de Meteored Samuel Biener señala que, en los próximos días, nuestros cielos podrían verse inundados por una lengua de polvo que recorrerá todo el oeste de Europa.
Esta "calima" que señala Biener la traerá una masa de aire subtropical, que elevará las temperaturas máximas hasta los 30º en muchos puntos de nuestro país. Se trata de un "calor anómalo" que el experto de Meteored afirma que puede venir acompañado de las conocidas como lluvias de barro o de "sangre en países donde este fenómeno es poco habitual".
Europa se teñirá de naranja los próximos días
'Olivia' será una de las borrascas que favorecerán, en las próximas semanas, la subida de una masa de aire muy cálida para esta época del año, que con su circulación de sur favorecerá la irrupción de polvo en suspensión. No solo experimentaremos un ambiente turbio en nuestro país, pues la "lengua de polvo" barrerá países como Francia, Reino Unido, Suiza, Países Bajos, Bélgica y Alemania, y podrá incluso llegar hasta Dinamarca, Suecia o Noruega.
En estos países, el polvo en suspensión podría caer a través de las lluvias de barro: en las zonas nevadas, la fusión de las partículas con la nieve teñirán de naranja las laderas de algunas montañas europeas. Será durante el fin de semana cuando una nueva vaguada se descolgará sobre el oeste de Europa, para empujar la calima hasta el centro del continente.
El tiempo en España durante los próximos días
Al referirse en concreto a la incidencia de la calima en España, Biener afirma que en los próximos días varios frentes dejarán precipitaciones en la vertiente atlántica y en el tercio septentrional del país. La semana que viene, el experto de Meteored espera que se descuelguen vaguadas con bajas presiones al oeste de la Península.
Tal y como señala Europa Press, existe el riesgo de que las concentraciones de partículas PM10, a causa de esta lengua de polvo, pasen sobradamente los los 45 ug/m3, el límite hasta el que el aire se considera saludable por la OMS.
