Después de un fin de semana de calor asfixiante, una vaguada atlántica dejará aire más fresco que provocará un descenso térmico generalizado, aunque a su paso por la península también pueden registrarse chubascos tormentosos localmente fuertes en el centro, norte y nordeste peninsulares y en Baleares y la entrada de una DANA (depresión aislada en niveles altos).
Según el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), José Luis Camacho, este martes habrá un descenso generalizado de temperaturas y la aproximación de un frente Atlántico aumentará la nubosidad por el noroeste.
El descenso de valores se registrará gracias a la aproximación de una vaguada en altura desde el Atlántico y se producirá inestabilidad en la mitad norte peninsular.
Avisos por lluvia y tormentas
En grandes zonas se prevén cielos poco nubosos o despejados, pero la nubosidad de evolución en zonas de montaña y aledaños de la mitad norte y extremo oeste peninsular dará paso a chubascos y tormentas en el centro, norte y en el nordeste peninsulares, más probables e intensos en zonas de montaña, incluso localmente fuertes y con granizo y rachas de viento fuertes en las cordilleras Cantábrica, Ibérica y Pirineos.
La AEMET ha establecido aviso naranja por tormentas fuertes e intensidad de lluvia en Pirineos de Huesca y zona central de dicha provincia. No se descartan tormentas secas aisladas en la meseta norte y otras zonas más al sur.
En Canarias se registrarán intervalos nubosos y en las zonas montañosas nubes de evolución con posibilidad de algún chubasco ocasional en la isla de Tenerife, con posible calima que afectará también al centro y sur peninsulares.
Zonas donde seguirá el calor y lugares donde bajarán más las temperaturas
Se prevé un descenso casi generalizado de las temperaturas, finalizando así la ola de calor por el noroeste, descenso que será notable y localmente extraordinario en las máximas del Cantábrico.
Así, solo se esperan aumentos en estas áreas:
- Andalucía occidental.
- Interiores del sudeste.
- Baleares.
- Zonas de medianías de las Islas Canarias.
Todavía se superarán los 36 ºC en interiores de la mitad sur y del nordeste, zonas de la Meseta norte y de los archipiélagos, y se alcanzarán localmente los 40 ºC en el medio Ebro, en donde está en vigor el aviso naranja por temperaturas máximas.
Predominará viento de componente este en el tercio oriental peninsular y Baleares; oeste y norte en Galicia y Cantábrico, y oeste y sur en el resto; con poniente tendiendo a moderado en el Estrecho y en Canarias soplará viento alisio moderado con algún intervalo de fuerte.
Habrá un descenso generalizado de temperaturas gracias a que la vaguada fría desplazará a la dorsal y terminará de atravesar la península, dando lugar a un aumento de la inestabilidad en el tercio nordeste, aunque en el resto del territorio se registrarán cielos poco nubosos.
Asimismo, la aproximación de un frente atlántico aumentará la nubosidad por el norte, este y Baleares, con precipitaciones desplazándose de oeste a este, y posibilidad de chubascos y tormentas en los tercios norte y nordeste, que serán más probables e intensos en montaña, incluso localmente fuertes y con granizo en la Ibérica y Pirineos, sin descartar en los litorales de Tarragona.
Hay avisos de nivel naranja por tormentas en Pirineos de Huesca y las Cinco Villas (Zaragoza) y de forma ocasional y menos frecuente e intensa pueden darse en otras zonas del norte, este, centro y Mallorca, sin descartar tormentas secas aisladas en la meseta norte y en sierras del sureste.
En Canarias se esperan intervalos nubosos y en las islas montañosas nubes de evolución con posibilidad de algún chubasco ocasional, con temperaturas que superarán los 36 ºC en el sur de las islas.
Se superarán también los 36 ºC en valles del tercio sur, litorales de Málaga y Granada y puntos de Mallorca.
Para este miércoles, la vaguada con núcleo frío se asentará en el este de la península, con una muy posible evolución a una depresión aislada en niveles altos (DANA), que provocará inestabilidad en el área del Mediterráneo, ocasionando el primer episodio de lluvias significativas, afectando al nordeste peninsular, Levante y Baleares.
