La primera semana del verano climatológico, que llegó el pasado 1 de junio, va a ser interesante en cuanto a la meteorología se refiere, según explica Roberto Brasero. Una semana que tendrá de todo y que pasaremos del calor veraniego, por las tormentas y también por la lluvia a final de semana.
Este lunes por la tarde llegarán las primeras tormentas, aunque no se notará en las temperaturas. De hecho, mañana martes y el miércoles viviremos un calor completamente veraniego rozando lo 40 grados en zonas de Andalucía. Sin embargo, el viernes llegará una borrasca a nuestro país, que podría convertirse en DANA, que dejará fuertes lluvias.
Desde hoy, subirán las temperaturas en el norte y este de la Península, y otra vez podría llegarse a esos 35 °C en el Guadiana y en el Guadalquivir. Mientras, el ambiente será más fresco en el Cantábrico, donde se rozarán los 20 a 22 °C. Las tormentas anunciadas para esta tarde se formarán en puntos del este, centro y sur peninsulares, que podrán ser localmente fuertes y estar acompañadas de granizo o rachas de viento intensas.
Más calor a mitad de semana y fuertes tormentas
Este martes, será el comienzo del aumento de las temperaturas que llegarán a ser totalmente veraniegas, casi similares a las de la pasada semana. Así, amplias zonas del norte de la Península superarán los 30 °C y la zona centro, Extremadura, oeste de Castilla-La Mancha y Andalucía registrarán de 32 a 34 °C. Asimismo, Valles del Tajo, Guadiana y Guadalquivir sobrepasarán los 34 a 35 °C.
Paralelamente, este día podrían volver a formarse tormentas en puntos del este, centro y sur de la Península, si bien serán en general menos intensas que el día anterior.
Desde el miércoles el aumento de temperaturas se dará prácticamente en todo el país, y en líneas generales predominará el tiempo estable sin descartar algún chaparrón aislado por la tarde en puntos del interior peninsular, especialmente en entornos montañosos, según explican desde la Aemet.
Además, el calor se notará en casi todo el país con 32 a 34 °C en puntos de la meseta norte, por ejemplo en ciudades como Valladolid o Palencia; 35 °C en el centro y en el nordeste peninsulares, por ejemplo en ciudades como Lleida, Madrid o Toledo, también en Zaragoza; y, de hecho, se podría llegar a los 38 °C grados en los valles del Guadiana y Guadalquivir, por ejemplo en ciudades como Sevilla o Córdoba.
El fin de semana será lluvioso
El viernes será el inicio de la bajada de las temperaturas por la llegada de una borrasca atlántica, que podría convertirse en DANA. De esta manera, aumentará la nubosidad en el oeste y en el sur de la Península y habrá posibilidad de lluvias y chubascos en el Cantábrico, Galicia, Castilla y León y norte de Extremadura que débilmente podrían afectar también a puntos de Navarra, La Rioja, Aragón, zona centro y restos de Extremadura y Andalucía Occidental.
Mientras, las temperaturas comenzarían a bajar por el extremo sur y por el tercio norte de la Península. En el resto del país, los valores no bajarían, por lo que el calor aún continuaría con 30 a 32 °C en la meseta norte y sur de Galicia y 34 a 36 °C en la depresión del Ebro, puntos de Baleares y una parte del centro y sur del territorio peninsular.
De cara al fin de semana, las bajas presiones rápidamente alcanzarán nuestro país, dando lugar a una situación el sábado de lluvias y chubascos tormentosos en amplias zonas del territorio. En general, las precipitaciones podrían llegar a casi cualquier punto salvo al área mediterránea, tampoco llegarán a Baleares y las más abundantes se producirán en el noroeste de la Península, es decir, en el sur de Galicia, Castilla y León, Cantábrico y Pirineo.
Asimismo, es probable que el domingo continúe este tiempo inestable, sobre todo en la mitad norte peninsular, con lluvias y chubascos que también alcanzarán la zona centro, sin descartar algunos chaparrones más aislados en la mitad sur y Baleares. En esta jornada, las lluvias más abundantes se darán en el Cantábrico oriental, norte de Navarra, los Pirineos, este de Castilla y León y norte de Cataluña, aunque la incertidumbre aún es alta y esto podría cambiar.