El tradicional discurso de Nochebuena del rey Felipe VI se convirtió en uno de los más esperados después de un año marcado por las polémicas que afectan a su padre don Juan Carlos sobre los presuntos escándalos de corrupción.
Durante el tradicional mensaje, Felipe VI hizo referencia a la delicada situación que vive el emérito aunque no mencionó su nombre. "Los principios morales y éticos nos obligan a todos sin excepciones; y están por encima de cualquier consideración, de la naturaleza que sea, incluso de las personas o familiares", comentó. Sobre dichas palabras, la encuesta de NC Report para 'La Razón' recoge que el un 73,6 % de los encuestados consideran que dicha alusión "fue la adecuada", frente a un 13,9 % que no la vio adecuada y un 12,5 % que no sabe, no contesta.
El discurso fue buen acogido por la población según la encuesta, ya que al 81,6 % de los encuestados le gustó, de los cuales, a quien más convenció se encuentran los más mayores seguido muy de cerca, con un 83,3 % de los de mediana edad. Solo a un 10,5 % no les satisfizo.
El mensaje del rey fue el más visto de la historia con un total de 10,7 millones de espectadores.