La coalición de izquierdas ha remitido un documento sobre su posición ante la investidura en el que no menciona ni al PSOE ni a su candidata a la Junta, Susana Díaz, pero se ofrece a explorar la posibilidad de presentar un candidato o candidata alternativa que no sea la del "tripartito reaccionario" y en caso de que PP, Cs y Vox no sumen la mayoría suficiente.
No obstante, Adelante Andalucía, que en caso de alcanzar un acuerdo dará su voto a fin de evitar que se conforme una agenda política "antisocial y antiandaluza" marcada por Ciudadanos, Vox y PP, reitera que no va a conformar gobierno alguno.
Esgrime que la persona que se presente para la candidatura a la Presidencia tendrá que ser acordada por consenso y comprometerse a aceptar como programa de urgencia en el primer año de legislatura determinadas medidas.
Entre ellas, blindar por ley fondos para políticas de igualdad con perspectiva de género con un 5 % del presupuesto o destinar el 5 por ciento del PIB andaluz a educación pública, 7 % en sanidad pública y 2 % a la dependencia.
También reclama el aprovechamiento al 100 % de la infraestructura pública en educación y sanidad, la subida del complemento autonómico a las pensiones no contributivas hasta alcanzar el Iprem (Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples) y la recuperación de los servicios privatizados como los de emergencia, monitoras de educación especial o ayuda a domicilio.
Las exigencias que esta formación pone al candidato a la Junta pasan por aprobar la ley de titulizaciones de las hipotecas, reformar el reglamento para reducir los privilegios de los parlamentarios y aprobar la ley de emergencia habitacional.
Las condiciones se supone que a un candidato del PSOE, con 33 escaños, frente a los 17 de Adelante Andalucía, son un compendio de la medidas que tanto Podemos como IU han venido demandando a lo largo de la pasada legislatura.