Adriana Lastra: "El extremismo y el bloqueo que proponen las derechas no es un proyecto de país"
La portavoz socialista en el Congreso, Adriana Lastra, ha sido la encargada de cerra las intervenciones de los grupos parlamentarios en la Cámara antes de la primera votación de investidura. La socialista ha arremetido duramente contra el bloque de derechas acusándoles de "extremistas" y de no "respetar la voluntad de los ciudadanos". "Las derechas derrotadas solo respetan la voluntad de los ciudadanos cuando les votan a ellos", ha criticado la portavoz socialista.
En su intervención en la segunda sesión del debate de investidura del candidato Pedro Sánchez, Lastra ha advertido al líder 'popular', Pablo Casado, de que si sigue hablando y actuando como Vox, sus votantes terminarán votando a la formación de Santiago Abascal.
Bajo el punto de vista de Lastra, el auge de la ultraderecha se debe a que Casado se ha "echado en sus brazos" y les ha abierto la puerta de entrada a las instituciones gobernando con ellos en determinados ayuntamientos y autonomías.
"Tanta vuelta, tanto ir y venir que si la derecha moderada, el centro, el centro reformista, tanto esfuerzo para convencer a los españoles de que son ustedes demócratas para acabar donde empezaron hace 40 años, de la mano de la extrema derecha", ha denunciado la dirigente socialista.
Recordando las declaraciones de la presidencia de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que se preguntaba tras la exhumación de Franco qué sería lo siguiente, "¿las parroquias del barrio? ¿arderán como en el 36?", Lastra ha señalado que "lo único que se ha incendiado es una derecha que casi se comporta como el franquismo".
La dirigente socialistaha acusado a los 'populares' de "utilizar" a las víctimas del terrorismo con fines partidistas, les ha llamado "fábrica de independentistas" y les ha afeado su gestión de la última crisis económica, que provocó una oleada de "trabajadores pobres".
Más dura incluso que con Casado, ha estado Lastra con la portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas, a la que ha acusado de "alentar tamayazos", en alusión al caso de los dos diputados tránsfugas que impidieron en 2003 que el PSOE gobernara la Comunidad de Madrid, provocando una repetición electoral que propició que el PP siguiese en el poder.
"No sé con qué tipo de diputados está acostumbrada a tratar usted, pero los de esta Cámara ni son arribistas ni tránsfugas. Si pensaba traer una bolsa con dinero se lo vamos a ahorrar. En política hay algo peor que estar en la oposición, es estar en la irrelevancia", le ha espetado a la dirigente naranja, que ha respondido exhibiendo una carpeta con el currículum vitae de Lastra, con el ánimo de recordar que la dirigente socialista no tiene un título universitario.
La portavoz socialista se ha referido a los diputados de Vox directamente como "la anti España" y les ha acusado de alimentarse de la "incertidumbre y el temor" agitando los "espantajos de un pasado fracasado". "No quieren construir una España mejor ni devolver a España su grandeza, sino destruir lo que nos hace grandes, la libertad y la justicia social", les ha espetado.
Lastra ha avanzando que los socialistas van a desmontar sus "mentiras", como la de afirmar que la ley de violencia de género no funciona, cuando ha permitido que 30.000 mujeres cuenten con protección policial. "Detrás de cada cifra una mujer ha iniciado una nueva vida", ha dicho Lastra, que ha recordado cómo un candidato de Vox al Congreso llamó "arpía" en Twitter a la víctima del caso de violación múltiple de 'La Arandina', menor de edad, tras conocer la sentencia.
"No sigan buscando más, la anti España son ustedes, el partido del odio", ha zanjado la portavoz, que ha subrayado que la izquierda ama todo lo que la ultraderecha detesta: el feminismo, el ecologismo, la diversidad, la justicia social y la libertad.
Tras la intervención de Lastra, el portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, ha pedido la palabra para acusarla de "mentir" al vicularles con el franquismo y acusarles de estar "contra las mujeres y los gays". "Les vamos a arrasar en las próximas elecciones", ha abundado, a la vez que ha denunciado es que es una "vergüenza" y una "indignidad" que el PSOE haya "pactado con Bildu".
Para el PSOE, el mejor "antídoto" contra la ultraderecha es un Gobierno de izquierdas. Por eso, ha alentado a sus socios de Unidas Podemos a "hacer que merezca la pena".
También ha dirigido unas palabras a ERC, cuya abstención permitirá la investidura de Sánchez en segunda votación, y ha indicado que no sólo les ha unido el "espanto" al auge de la ultraderecha, sino también la "convicción en la grandeza de la política" como instrumento para "resolver problemas". "Vivimos tiempos difíciles pero nuestras grandes diferencias no pueden ser la coartada para la derecha", ha advertido.