El exvicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, ha calificado de "absolutamente despreciable" el apoyo de EH Bildu a los Presupuestos Generales del Estado. Asímismo, ha cargado contra el presidente Pedro Sánchez porque, a su juicio, lidera un Ejecutivo que "no es natural" y en el que se toman "decisionan muy autoritarias".
En una entrevista en la televisión pública, Guerra ha dicho que hay "muchos españoles" y, sobre todo, "muchos socialistas" que tienen "un nudo en la garganta, un grito que no sale, pero que están deseando gritar: '¡Con Bildu no, con Bildu no!'. Tal cual lo decía el presidente".
También se ha referido al acercamiento de los presos de ETA a las cárceles del País Vasco y ha afirmado que esa estrategia se hace "por intercambio de votos" y que es ahí donde está "la falta de ética".
Considera "no natural" el Gobierno de coalición con Podemos
Guerra ha insistido en que el Gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos "no es natural" y ha recordado que fue el propio Pedro Sánchez quien repitió varias veces aquello de que no podría dormir si Pablo Iglesias estuviera en la vicepresidencia: "Pero ahora duerme con él".
A su juicio, Sánchez se encuentra "en una tela de araña" que él mismo ha tejido y se ha preguntado cuánto "peaje" habrá que pagar. También considera que sostener ese pacto con EH Bildu, nacionalistas y Podemos es difícil de soportar si no es sólo para los Presupuestos sino para toda la legislatura.
En esta misma línea, considera que la alianza que hizo posible la moción de censura de Pedro Sánchez contra Mariano Rajoy fue "buena" pero la moción "no es solvente para gobernar".
Eliminar el castellano como lengua vehicular es "absurdo", pero "simbólico"
En esta línea, el exvicepresidente ha criticado con dureza tanto el pacto con la formación vasca, como la enmienda de la Ley Celaá que elimina el castellano como lengua vehicular. Para él, se trata de decisiones "absurdas" que tienen una "repercusión simbólica" para la sociedad.
"Y hay un principio, me parece a mí, en la historia, y es que cuando una sociedad acepta lo absurdo sin reaccionar es una sociedad en decadencia. El español se va a tratar como una lengua extranjera en España. Es un absurdo tan tremendo que si la sociedad asume sin reaccionar.... está en decadencia. Cuando esto se asume así es que la sociedad va hacia atrás", ha sostenido.
Además, también considera "absurdo" que se acepte que dos miembros del Gobierno hayan acusado de maniobras graves al jefe del Estado y no hayan sido cesados: "No deberían haber durado ni cinco minutos, pero esto demuestra quién manda", en referencia a las acusaciones de Pablo Iglesias y Alberto Garzón contra el Rey Juan Carlos.
No obstante, afirma que la marcha de España del rey emérito fue "un error" y que este "no debió irse: no pinta bien". Ha precisado que el hecho de que sean "tantas las informaciones sobre movimientos financieros" hace pensar que "cuando el río suena, alguna piedra llevará".