Varios jóvenes, que se han presentado como conocidos y miembros del círculo de algunos de los detenidos y fallecidos, han relatado que Houssaine trabajaba como repartidor en un restaurante de kebabs de Ripoll y que aparentaba una vida muy normal, pero que en los últimos días colgaba extraños mensajes en sus perfiles de internet, como en Instagram.
"Crecimos juntos aquí en el barrio y tenía una vida muy normal. Sólo fue en la última semana que no salía mucho", ha apuntado una de estas personas.
Así, han mostrado como el joven --Houssa en esta red social-- lanzó mensajes como "Paz para mí mismo, odio para el resto", "Tu tarea es descubrir tu mundo y luego entregarte a él con todo tu corazón" y "Voy con la esperanza del que todo lo ha perdido y así todo lo que viene es bienvenido".
Según han relatado, Houssaine murió en la explosión de Alcanar (Tarragona) del miércoles y tenía una estrecha relación con el resto de terroristas y con otro joven, Youssef Aallaa --hermano de Said Aallaa, también fallecido--, por lo que han sugerido que podía saber las intenciones que tenían y haber colaborado.
También han explicado que los padres de Younes se han mudado fuera de la localidad gerundense después de los registros que realizaron los Mossos d'Esquadra.