Finalizaban casi cuarenta años de un reinado histórico, desde la muerte de Franco y la Transición hasta las últimas polémicas con sus viajes privados y los problemas de salud. Don Juan Carlos se dirigía a los españoles para explicarles que abdicaba para abrir paso a una nueva etapa.
De inmediato, se tuvo poner en marcha un proceso que nunca antes se había planteado. Era la primera sucesión al trono en la historia de la democracia. Dos semanas después, la abdicación se hacía oficial con una firma y al día siguiente, Felipe VI se proclamaba nuevo rey de España.
Aquel día fue la última que apareció Don Juan Carlos en público en mucho tiempo. Desde entonces, dejó todo el protagonismo a su hijo. Para dejar así también que la nueva generación reflejase una nueva etapa.
Ese cambio y la nueva manera de enfocarlo se reflejó enseguida entre los ciudadanos. El año previo a la abdicación, las encuestas reflejaban la escasa confianza de los españoles en la monarquía, tras el caso Urdangarín, el episodio de caza en Botsuana o los constantes problemas de salud del rey.
El aniversario coincide con la presencia de los Reyes Felipe y Letizia en París, en su primer viaje de Estado a Francia. Es la visita que estaba programada para el pasado mes de marzo, pero que quedó anulada por el accidente aéreo de Germanwings.