La candidatura liderada por el excoordinador de IU Andalucía Antonio Maíllo ha sido la ganadora de las primarias para la nueva Coordinadora Federal de la formación con un 53,4%, una mayoría absoluta que le garantiza ser el sucesor de Alberto Garzón.
Según informó este martes IU, la candidatura de Maíllo se impuso a las encabezadas por la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, que sacó el 23,4%; el coordinador de IU Comunidad de Madrid, Álvaro Aguilera, que obtuvo el 14,1%, y el exresponsable de Economía y Empleo de la Ejecutiva de Cayo Lara, José Antonio García Rubio, a la que apoyó el 8,3%. Un 0,8% votó en blanco.
Dado que la designación del líder de IU se realiza de forma indirecta mediante votación el próximo domingo de la Coordinadora Federal, la organización despliega primarias en el marco de su asamblea federal de este fin de semana para que las bases decidan el peso entre entre las diferentes listas de los 80 miembros iniciales del máximo órgano ejecutivo. Así, de cara al domingo, Maíllo cuenta con la mayoría de los integrantes electos para proclamarse líder de la formación.
Maíllo gana el pulso
IU ha encarado un proceso de confrontación entre los diferentes sectores, repartidos en cuatro candidaturas, al fracasar los intentos de consensuar una candidatura de unidad para renovar su dirección como se marcó inicialmente la comisión preparatoria de la asamblea federal.
La ejecutiva saliente, que en la anterior asamblea confluyeron con Garzón y congregó el 80% del respaldo de la organización, se fracturó entre los partidarios de Maíllo y la ministra de Juventud tras meses de negociaciones infructuosas para una lista conjunta.
En esa pugna la militancia se ha decantado mayoritariamente por el exlíder andaluz, que se postuló en respuesta a la candidatura de la ministra contaba con el respaldo de la dirección del PCE (con su secretario general Enrique Santiago en su lista), miembros de la ejecutiva como la coportavoz Amanda Meyer, el eurodiputado Manu Pineda y con apoyo destacado de dos de las federaciones con más peso en afiliación: Andalucía y Asturias.
Además, contaba con el respaldo de los coordinadores autonómicos de Canarias, Cataluña, Baleares, Extremadura, Euskadi y de la federación de IU en el Exterior.
De esta forma, Antonio Maíllo regresa a la primera línea política tras renunciar en 2019 como coordinador de IU en Andalucía, cargo que ostentaba desde 2013 y regresar a su puesto de profesor de secundaria. Ahora, su victoria vuelve a situar al PCE y la federación andaluza como referentes de la organización.
Partidario de confluencias amplias en la izquierda, primero con Podemos en 2019 en el caso andaluz (con la marca Adelanta Andalucía) y ahora con Sumar, Maíllo ha desplegado un discurso basado en potenciar el contacto de la dirección de IU con la militancia y la calle, así como desplegar una política para las "periferias".
Golpe para Sira Rego
Mientras, el resultado supone un golpe para Sira Rego, ministra por la cuota de Sumar y cercana al excoordinador Alberto Garzón, que trató in extremis de llegar a un pacto con el equipo de Maíllo y estaba arropada por los coordinadores de la Comunidad Valenciana, Aragón, Murcia, Castilla La Mancha y La Rioja.
Ahora, ambos sectores quedan emplazados a negociar la composición de la nueva Ejecutiva y Maíllo ya manifestó que abogaba por la continuidad de Sira Rego como ministra en caso de alzarse con la victoria en este proceso congresual.
Tras la asamblea la Coordinadora Federal será completada hasta los 130 miembros para incluir a representantes designados por las federaciones, los partidos federados en IU y miembros natos como los coordinadores autonómicos.
Con esa composición definitiva durante su primera reunión tendrá que volver a refrendar la elección de coordinador, pero no se prevén cambios dado que se suele reproducir las proporciones emanadas de estas primarias.