Como es habitual en el Congreso cada partido tenía clara su línea argumental. Por un lado, el Partido Popular que en todas las intervenciones de su grupo, recordaba al Gobierno sus casos de corrupción. Y las respuestas del PSOE. Nada que ver con el planteamiento de los populares. Toda la bancada socialista tenía claro por dónde tenían que ir sus palabras. Por los datos de The Economist, que han situado a España como la mejor economía de la OCDE en 2024. Así, uno tras otro, Feijóo, Cuca Gamarra o Miguel Tellado aludían a los casos de corrupción. Mientras que Sánchez, María Jesús Montero o Félix Bolaños, respondían con la economía.
El PP ataca con la corrupción
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, no escatimó en ataques. Durante su intervención, acusó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de encabezar un Ejecutivo salpicado por la corrupción y con una "precariedad parlamentaria" evidente tras recientes derrotas legislativas. Feijóo también aludió a las investigaciones que afectan a Begoña Gómez, esposa de Sánchez, y a su hermano David, remarcando que "en su mesa de Navidad se sentarán al menos dos imputados".
La estrategia del PP incluía acusaciones específicas contra figuras como Santos Cerdán o el exministro José Luis Ábalos. Según Feijóo, estas cuestiones reflejan no solo problemas éticos, sino también la fragilidad de la coalición gobernante. "Ni el independentismo le perdonará sus mentiras ni los jueces le perdonarán sus delitos", afirmó.
Economía como escudo del PSOE
Por su parte, el presidente Sánchez respondía con un mensaje de optimismo económico, apoyado por el informe de The Economist, que destaca a España como la economía con mejor desempeño de la OCDE en 2024. Según este análisis, el país lidera en indicadores clave como el crecimiento del PIB, la reducción del desempleo, el balance fiscal y los retornos bursátiles.
"Somos un país formidable y tenemos un gran futuro por delante", destacó Sánchez, quien aprovechó el informe para defender la gestión de su Gobierno y el esfuerzo de los ciudadanos, empresas y administraciones. Sánchez subrayó que estos logros colocan a España en un momento de recuperación económica único, desmarcándose de las críticas del PP y acusándoles de no abordar temas cruciales como la vivienda, el empleo o la educación. Sin embargo, no respondió a nada de lo que los populares habían puesto en la mesa. Del mismo modo, que el PP esquivó hablar de la economía.
Este choque de narrativas quedó perfectamente encapsulado en el intercambio en el Congreso: Feijóo insistiendo en que "los jueces donde usted ve comportamientos ejemplares ven indicios del delito", mientras Sánchez replicaba que "España vive uno de sus mejores momentos de las últimas décadas".