“Lost in traslation”. Como Bill Murray y Scarlett Johansson en Tokio, así se sienten en Podemos a decir de Ione Belarra quien a la pregunta: “¿Y ahora qué?”, ha respondido que andan perdidos en la transición, en la mudanza al grupo mixto.
Los cinco de Podemos han hecho pleno de presencia en un acto ante el que solían mostrarse esquivos, pero su situación ahora no les permite el lujo de ausentarse de un foco que buscan tras meses soterrados por Yolanda Díaz.
Ione Belarra ha dado explicaciones horas después de la ruptura. Flanqueada por sus compañeros, ha afirmado que salirse de Sumar ha sido una decisión difícil pero necesaria. “No nos quedaba otro remedio”, ha justificado. Y ahora emprenden su camino “con fuerzas renovadas” a fin de seguir aplicando las “políticas transformadoras” que han cambiado nuestro país.
La secretaria general de los morados asegura que la salida de Sumar se sustancia en el obligado compromiso de atender al mandato de sus votantes. Se entiende pues que Belarra se lleva consigo a quienes el 23J tomaron una papeleta de Sumar con el subtítulo de Podemos. Sin embargo, minutos después Yolanda Díaz ha puesto su mandato por delante: “Mejorar la vida de la gente”. Ha deslizado, además, que posicionarse en contra del gobierno de coalición sería hacerle el caldo gordo a la derecha y eso “no lo comprenderían las personas progresistas”. Avisa la vicepresidenta primera que la desafección ciudadana la genera hacer “políticas de parte”.Habrá que ver si la tónica parlamentaria de los morados será actuar de parte propia, de momento sus registros irán con un membrete aparte y apartados en la ubicación en el Congreso.
Cinco son los que le quedan a Podemos de los sesenta y nueve diputados que atesoraron tras las generales de 2015. Son pocos pero tantos como los del PNV que recordemos son una minoría de bloqueo. Al Gobierno le tocará habilitar un hueco más en la agenda cuando toque negociar.
