Para el Gobierno de Pedro Sánchez volver a enterrar a Franco en la Catedral de La Almudena no es una opción y a juzgar por lo dicho por Carmen Calvo, para la Iglesia tampoco.
La vicepresidenta descarta esa posibilidad y se ampara en que la ley impide ensalzar la figura del dictador permitiendo que sus restos queden inhumados en un lugar emblemático como La Almudena.
"El Estado, a través del Poder Ejecutivo, tiene que garantizar en todo el territorio español que no se enaltece a Franco en ningún sitio, en ningún punto del territorio, así que el lugar donde estén finalmente sus restos tiene que ser un lugar donde no se puedan producir manifestaciones de enaltecimiento", ha dicho en los pasillos del Congreso.