Casado pedirá amparo al TC por la decisión de admitir todas las formas de acatamiento de la Constitución
El presidente del PP, Pablo Casado, ha confirmado que su grupo presentará un recurso de amparo ante la Mesa del Congreso y también acudirá al Tribunal Constitucional, al considerar que no todos los diputados electos han adquirido la condición plena como parlamentarios tras utilizar fórmulas que "desvirtúan o vacían" el acatamiento de la Constitución.
Los diputados optaron por fórmulas heterogéneas de acatamiento de la Constitución –paso previo indispensable para su condición de miembros plenos de la Cámara- en la sesión constitutiva del Congreso, yendo éstas desde la simple promesa o juramento hasta expresiones más alambicadas como las empleadas por los miembros de ERC o Junts, que apelaron a respetar el "mandato democrático del 1 de octubre" e instaron a la "libertad de los presos políticos".
La fórmula de acatamiento de la Constitución para que los diputados tomen posesión de su cargo ha sido uno de los momentos más esperados de la sesión constitutiva del Congreso.
De hecho, este trámite vino precedido del compromiso de la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, de hacer una "aplicación jurídica" y "no arbitraria" de las normas en lo referido a las fórmulas de acatamiento, aunque concluyó con las denuncias de PP, Vox y Ciudadanos.
Ante "el espectáculo que hoy se ha vuelto a reiterar" en los acatamientos a la Constitución, Casado tomó la palabra y dijo a Batet que el PP "ya había avisado de que estaría muy vigilante al desarrollo de la sesión" y a las fórmulas usadas por los políticos para adquirir la condición de diputados.
Le reprochó que esta Cámara "no se defienda a sí misma de un espectáculo que atenta contra el propio orden constitucional". Casado subrayó que el Reglamento habla de "no utilizar fórmulas que desvirtúen o vacíen el acatamiento de la Carta Magna", algo que "ha sucedido en al menos un medio centenar de ocasiones".
Por eso, espetó a Batet que "no debería haber dicho que todos los diputados han adquirido la condición plena como parlamentarios". "Al menos tendrían que haber puesto medios para que los servicios taquigráficos pudieran cotejar con la Mesa si eso ha sido así", apostilló Casado.
Por estos hechos, el presidente de los populares adelantó que su partido presentará un recurso de amparo ante la Mesa y también ante el Tribunal Constitucional tras el "espectáculo" que se ha vuelto a vivir hoy en la sesión constitutiva de la Cámara Baja.
Por su parte, el líder de Vox, Santiago Abascal, advirtió de que su partido podría acudir a los tribunales y llegar a denunciar a Batet por "prevaricación administrativa" si se aceptaba la fórmula de asunción de sus cargos empleada por cerca de 50 diputados nacionalistas, entre los que incluyó a PNV o ERC.
Abascal afirmó que estos electos nacionalistas e independentistas asumieron sus cargos "ilegalmente", puesto que, según su criterio, no son válidas las "fórmulas imaginativas" que habían usado para jurar o prometer su condición de parlamentarios.
El responsable de Vox sostuvo que el Tribunal Constitucional ha dicho que estas fórmulas particulares de acatar la Carta Magna tienen "como límite" que no se desnaturalice el contenido de este acto legal que se realiza. Por este motivo, defendió que las expresiones usadas este martes por los diputados nacionalistas podían considerarse más como un "acto de conjura contra la Constitución" que como el acatamiento de la norma fundamental.
También la portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas, pidió la palabra en aplicación del Reglamento para expresar su convicción de que la flexibilidad de la que habló la presidenta del Congreso y que reconoce el Tribunal Constitucional puede referirse a algunas de las expresiones utilizadas por algunos electos, que juraron "por España" o por los "derechos humanos".
Incluso, recordó, la expresión "por el planeta" utilizada en la anterior legislatura por el diputado de Equo Juantxo López de Uralde y que "me encantó".
Sin embargo, añadió, en la sesión de este martes se ha jurado o prometido en algunos casos "con graves insultos a nuestra democracia", al afirmar que es "una dictadura" o que hay "presos políticos", lo que equivale a decir que los jueces son "prevaricadores" y encarcelan "por ideas".
Arrimadas recordó a Batet que no es presidenta del Congreso solo "por los privilegios" de presidir la Cámara, sino también por las "obligaciones" que comporta, y la primera de ellas es velar por "el decoro" al propio Congreso y a las instituciones del Estado.
Le pidió por ello que no se comporte como "delegada" del Gobierno de Pedro Sánchez, sino que debe velar por el cumplimiento del Reglamento y de las sentencias del Tribunal Constitucional.
La recién reelegida presidenta del Congreso replicó a las críticas de Casado, Abascal y Arrimadas leyendo párrafos de sentencias del Tribunal Constitucional que rechazan anteponer "un formalismo rígido" en los acatamientos a "cualquier otra consideración", porque ello "violenta la propia Constitución", olvida los derechos fundamentales y "hace prevalecer una interpretación de la Constitución excluyente frente a otra integradora". En esa línea, continuó leyendo que la naturaleza representativa del Congreso "refuerza la idea de interpretación flexible".
Seguidamente, pasó a leer una resolución de este año de la Junta Electoral que apeló a esa jurisprudencia para dar validez a las fórmulas de acatamiento en la sesión constitutiva de abril. Y concluyó que las utilizadas hoy eran "admisibles" porque contenían sólo "expresiones que tienen un sentido modal o causal, que no implican condición, reserva ni limitación alguna del acatamiento". Además, puesto que habían sido utilizadas anteriormente, habían sido avaladas implícitamente por el TC.
Batet cumplió así su promesa a la portavoz popular, Cayetana Álvarez de Toledo, antes de los acatamientos, de que su comportamiento no sería arbitrario sino fundamentado jurídicamente, y remató que ella hacía suya esta interpretación "porque defendiendo los derechos fundamentales lo que hacemos es reforzar nuestra democracia". Además, advirtió de que el mismo artículo del Reglamento que permite tomar la palabra por cuestión de orden, al que se habían acogido Casado, Abascal y Arrimadas, establece que al final "debe acatarse la decisión de la Presidencia y no cabe debate alguno".