Pablo Casado ha vuelto así a referirse alcaso de María Dolores de Cospedal, ex secretaria general de los populares, quien este miércoles dejó su escaño y dos días antes su puesto en el Comité Ejecutivo tras el escándalo por la publicación de sus conversaciones con el excomisario José Manuel Villarejo.
Cospedal renunció ayer a su escaño en un comunicado en el que subrayaba que tomaba esa decisión para "liberar al PP de cualquier ataque" aunque también lanzaba un reproche a sus compañeros, al señalar que "un partido que no es capaz de defender a los suyos cuando están siendo injustamente atacados no puede esperar que los ciudadanos confíen en él".
Esta mañana, el número tres del PP, Javier Maroto, ha respondido a estas palabras advirtiendo de que "no valen ni medias tintas ni medias palabras ni mirar para otro lado" ante actitudes reprochables, y así lo piensa la dirección. "Y entonces sí y solo sí, se gana la confianza" de los votantes, ha apostillado.
En la misma línea ha hablado más tarde Pablo Casado, cuando ha insistido en que "no se va a tolerar ningún comportamiento que no sea ejemplar".
Y ha recordado que tanto él como Maroto han sido siempre firmes defensores de las siglas del PP y de que no haya "dobles raseros" por parte de la opinión pública o de otros partidos que pudieran "cebarse" con los populares, pero también creen que hay que ser "muy exigentes" ante "cualquier comportamiento que se saliera de la ejemplaridad que la ciudadanía reclama".
Por otro lado, Pablo Casado ha descartado hacer cambio alguno en el partido tras la salida de Cospedal, quien - ha recordado - estaba en el Comité Ejecutivo como vocal de libre designación sin atribuciones sectoriales ni territoriales.
El Comité Ejecutivo seguirá funcionando igual y además ahora "a pleno rendimiento", preparando primero las elecciones andaluzas pero pensando también ya en las citas con las urnas de mayo de 2019.