El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha señalado en declaraciones a los medios en Vigo, donde participará en las Jornadas nacionales de jueces decanos, que "no es razonable" anticipar las actuaciones del Gobierno si todavía "no están identificados" los movimientos futuros de JxS y la CUP.
Preguntado por cuál será el momento en que actuará el Gobierno, ha dicho que en estos momentos está estudiando la propuesta de los grupos que promueven la propuesta independentista "para ver si en sí misma ya tiene naturaleza jurídica".
Ha abundado en que la impugnación tendrá que ver con una norma con valor jurídico, no con "una declaración política", por mucho que la de ayer en el Parlament constituya "una falta de respeto a la democracia y a la convivencia" y "una provocación", como las palabras de su presidenta, Carme Forcadell, sobre la república catalana.
"Cuando se produzca una resolución, que esperamos que no suceda, sería el momento de analizar la naturaleza jurídica y promover las acciones que correspondan", ha aseverado.
Catalá ha recalcado que "si alguien se empeña en caminar en la búsqueda del conflicto, el Gobierno va a estar, una vez más, garantizando el interés general de todos los españoles y de los catalanes promoviendo actuaciones que impidan que se incumpla la ley, pero eso, cuando vaya llegando cada momento".
Opina que "eso es lo que corresponde en una democracia madura", al existir "un conjunto de normas que establecen nuestro modelo de convivencia" y que garantizan su cumplimiento.
"Tenemos que tener la confianza de que la razón está de nuestra parte, del lado de los demócratas, los que creemos en la Constitución, en el imperio de la ley", ha proclamado.
"Algunos, si creen que pueden vivir al margen de las reglas, están cometiendo un gravísimo atentado contra la democracia, el respeto a los ciudadanos, y van a tener siempre enfrente la fuerza del derecho", ha añadido.
Catalá ha indicado que la reforma del Tribunal Constitucional se fundamentaba, entre otros aspectos, en que este órgano debía tener "capacidad para hacer efectivas sus resoluciones", algo que hasta ahora no sucedía y "algunos creían que podían dejar de cumplirlas y no pasaba nada".
Por lo demás, ha subrayado que el Gobierno "va a estar en la defensa de la Constitución, del ordenamiento jurídico", y también en la búsqueda de "soluciones políticas", con "la mano tendida al diálogo con aquellos que quieran dialogar".
Ha abundado en que el Ejecutivo va a "estar permanentemente" en la línea de la colaboración con la Generalitat y "con todos los catalanes" para que en esa comunidad "se puedan financiar las pensiones, la sanidad y se paguen las facturas", cosas que "antes no pasaban".
"Trabajamos a diario por el bien común, por los intereses de los catalanes, y seguiremos en esa dirección", ha concluido.