CGT, sindicato minoritario en ambas empresas, con una representación de un 12 % en Renfe y un 16 % en Adif, ha tomado la decisión de convocar la protesta "una vez agotadas todas las vías de negociación, los plazos marcados por esta organización y la paciencia derivada de la buena voluntad negociadora".
La organización sindical ha explicado que la falta de respuesta por parte de Renfe y Adif a sus reivindicaciones colectivas genera "mucha incertidumbre dentro del colectivo ferroviario ante la falta de futuro de las propias empresas, poniendo en entredicho la continuidad del ferrocarril como servicio público".
CGT exige, entre otras cuestiones, soluciones en materia de empleo y la calidad del mismo, compromisos que garanticen el servicio público del ferrocarril, frenar las continuas externalizaciones de las cargas de trabajo o plantear "salidas" dignas de las empresas, a través de mecanismos como la jubilación parcial con contrato de relevo.