La votación de la ley de amnistía, por llamamiento y de viva voz, no ha deparado sorpresas, ya que solo el PP, Vox, UPN y Coalición Canaria han votado en contra de la ley clave de la legislatura, prometida por los socialistas a sus aliados catalanes a cambio del apoyo a la investidura de Pedro Sánchez.
Después de que hace mes y medio Junts dijera no, la ley ha reunido este jueves la mayoría absoluta necesaria al incorporar las últimas exigencias de los socios catalanes para blindar la norma ante causas de terrorismo como la de Tsunami Democràtic.
El texto aprobado borra toda responsabilidad penal, administrativa y contable de las personas relacionadas con el 'procés' durante doce años y abre la puerta al regreso a España del expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont.
Ha salido adelante tras duras negociaciones con Junts, que exigió restringir el margen de interpretación de los jueces y garantizar que nadie quede fuera del paraguas de la amnistía, con modificaciones referidas a delitos de terrorismo, torturas y malversación, entre otros.
Una ley para el "reencuentro"
En un debate cargado de referencias al adelanto electoral en Cataluña, el portavoz parlamentario del PSOE, Patxi López, ha salido a la tribuna para defender la norma, que su partido registró en solitario el pasado mes de noviembre, y ha reivindicado la ley porque cierra el "ciclo de decisiones políticas" con las que el Gobierno quiere conseguir el "reencuentro" en Cataluña.
En un discurso muy combativo contra el Partido Popular, a quien ha acusado de buscar el enfrentamiento, López ha defendido las acciones del Ejecutivo en busca de la "reconciliación" en Cataluña: mesa de diálogo, indultos, derogación del delito de sedición en el Código Penal y ahora la amnistía. Unas medidas que, según ha indicado, serán aplaudidas en un futuro, incluso por aquellos que las combatieron.
"No pasará el filtro judicial ni de la calle"
Encabezando el bloque del no a la amnistía, el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha avisado al Gobierno de que la normativa no pasará el filtro del Senado, el de la Justicia y tampoco el de la calle.
Ha reprochado al presidente del Gobierno que haya "acatado todo" lo que pedía el independentismo catalán" y ha pedido a la izquierda que no insulte a la inteligencia de los españoles hablando de reconciliación, cuando el único motivo por el que se aprueba la amnistía es la continuidad de Sánchez durante "un tiempo" en la Moncloa.
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha acusado, por su parte, a Sánchez de vender la soberanía del país en favor de un "cogobierno integrado por Mohamed VI y Puigdemont" y ha tachado de "colosal acto de corrupción" la votación de este jueves, que humilla a los españoles y les "roba su dignidad".
Junts y ERC avisan: el conflicto no acaba
El portavoz de Junts, Josep María Cervera, se ha dirigido desde la tribuna al ministro de Presidencia, Félix Bolaños, para advertirle de que la norma "la única hoja que gira es la de la represión y la injusticia, ninguna hoja mas" porque el "conflicto político histórico sigue existiendo".
Cervera ha cargado contra la derecha y quienes dicen que se trata de una ley "a medida" de los independentistas y tras apuntar que el texto es el resultado de "la generosidad colectiva", ha dado las gracias a los equipos jurídicos del PSOE y de ERC con los que han negociado y al resto de aliados parlamentarios.
En la misma línea, la diputada de ERC, Pilar Vallugera, ha advertido de que con este paso "no es suficiente" y ha asegurado que su partido seguirá "en el camino de la liberación nacional". "No vamos a parar hasta el ejercicio del derecho a la autodeterminación", ha reivindicado.
El grupo republicano ha sido arropado en el Congreso por el presidente de ERC, Oriol Junqueras, que fue condenado por el procès, la vicepresidenta del Govern catalán, Laura Vilagrà, y una representación de la Asociación de Municipios por la Independencia.
Desde EH Bildu, su portavoz, Jon Iñarritu, ha celebrado la aprobación de la ley, que ha calificado como la "más importante de la legislatura" y se ha preguntado si este texto, más completo, será "suficiente para evitar que haya quien prevarique", en una velada referencia a los jueces.
En la misma línea, el portavoz del PNV, Mikel Legarda, se ha sumado a las fuerzas catalanas al denunciar "una persecución obsesiva de la alta judicatura española" y ha ratificado su apoyo a la amnistía para afrontar "un conflicto institucional" irresuelto, la cuestión territorial, y "cerrar un ciclo político dramático".
Desde el grupo mixto, Podemos y el BNG han celebrado que la ley "es un punto de partida", mientras que los diputados de UPN y CC han criticado su aprobación. El ex diputado socialista José Luis Ábalos se estrenaba en ese grupo, ha votado sí pero no ha aplaudido.
Desde Sumar, Aina Vidal, de los comunes, ha celebrado una ley "colectiva" para avanzar frente a la "venganza", y Enrique Santiago ha destacado "elevadísimo consenso" en Cataluña en favor de la normalización.
Sánchez se muestra satisfecho tras la aprobación de la ley de amnistía
Pedro Sánchez se ha mostrado satisfecho tras la aprobación de la ley de amnistía en el pleno del Congreso.
Minutos después de abandonar el hemiciclo tras la votación a la ley, Sánchez ha respondido con un "si" a la pregunta de si está satisfecho con la aprobación de este jueves.
El presidente del Gobierno ha llegado al Congreso al inicio del debate del dictamen de la ley, pero no ha estado presente en el pleno durante las intervenciones de los portavoces y solo ha entrado al hemiciclo en el momento de la votación, que se ha producido por llamamiento a petición del PP, como todas las votaciones que se han celebrado en el Congreso vinculadas a la ley de amnistía.
En el debate y votación de la ley de amnistía ha estado presente, sin embargo, el dirigente de ERC, Oriol Junqueras y la vicepresidenta de la Generalitat catalana, Laura Vilagrà, que han seguido los discursos desde la tribuna de invitados.
Posteriormente se ha pronunciado en su cuenta de "X"
Dos meses en el Senado hasta que la amnistía esté en manos de los jueces
Tras recibir el visto bueno del Congreso, la ley de amnistía pone rumbo al Senado, donde comenzará una tramitación que podrá extenderse hasta dos meses. Entraría así en vigor a finales de mayo, momento en el que quedará en manos de los jueces su interpretación y aplicación.
Lo previsible es que el pleno del Senado, con mayoría absoluta del PP, vete la ley y que el texto tenga que volver al Congreso para que el PSOE y sus socios levanten ese veto y aprueben definitivamente la norma, registrada en solitario el pasado noviembre por el PSOE y que ha sufrido numerosos cambios estos meses para incorporar las demandas de ERC y Junts.
Si se cumplen los plazos, se publicará en el Boletín Oficial del Estado en plena incertidumbre electoral: entre los comicios catalanes, adelantados al 12 de mayo, y las elecciones europeas del 9 de junio.
Dos meses de "tramitación preferente y urgente"
La norma entrará en vigor en el mismo momento de su publicación en el BOE y, a partir de ahí, comienza a contar el reloj de dos meses establecido por la ley para que se aplique con carácter "preferente y urgente".