El Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tampoco se ha librado de la temida 'cuesta de enero'. El primer mes del año se presenta para el Ejecutivo como uno de los más difíciles de la legislatura, sobre todo tras la votación contra el decreto ley 'ómnibus' que no ha salido adelante por los votos de PP, Junts, Vox, UPN y PNV y es una de las derrotas más duras del Gobierno.
Sánchez tiene por delante un calendario judicial que le afecta en el ámbito personal, pero también en el profesional y que ya ha comenzado. El pasado 9 de enero declaró su hermano, David Sánchez, acusado de presuntos delitos de tráfico de influencias, malversación y prevaricación. El pasado 16 de enero declaraba Íñigo Errejón tras la denuncia de Elisa Mouliáa que le acusa de agresión sexual.
Si bien, a pesar de que tan solo queda una semana para que finalice el primer mes del año, al presidente del Ejecutivo tiene que afrontar el caso abierto contra su mujer, Begoña Gómez, así como el caso del fiscal general y la investigación contra el exministro de Transportes, José Luis Ábalos..
Sin apoyos en el Congreso
Pedro Sánchez ha recibido un nuevo revés, se ha quedado sin apoyos en el Congreso. El decreto ley 'ómnibus' que aprobaba la subida de las pensiones o la continuidad de las ayudas al transporte no ha salido adelante debido a los votos en contra de varias formaciones políticas, entre ellas Junts. El partido catalán ha sido clave para que la medida no salga adelante, aunque ambas formaciones se habían reunido en Bruselas para intentar desbloquear su relación.
De esta manera, tras unas semanas tensas marcadas principalmente por la petición de Puigdemont a Sánchez de una cuestión de confianza, decisión aplazada por la Mesa del Congreso, se ha demostrado que las relaciones entre socialistas y catalanes penden de un hilo muy fino que, de momento, dejan al Ejecutivo sin mayoría parlamentaria. Esto afecta también a otras medidas como la negociación de los Presupuestos Generales del Estado.
Investigación abierta contra su mujer, Begoña Gómez
Si bien, los problemas para Sánchez no se quedan ahí, sino que tiene a su alrededor varias causas judiciales que le afectan de pleno. A la causa abierta contra su mujer, Begoña Gómez, se ha sumado como testigo Telefónica, que ha afirmado que la mujer de Sánchez contactó con la compañía para financiar el software de la cátedra que codirigía. Además, el BBVA ha desvelado las verdaderas cuentas de Begoña Gómez, que constan de 21.304 euros y ha dicho que en noviembre, cuando salió a la luz que solo tenía 40,25 euros hubo "una incidencia de carácter técnico".
Investigación al fiscal general
A esta causa se suma la investigación al fiscal general, Álvaro García Ortiz, acusado de presunta revelación de secretos, entre otros delitos. El próximo 29 de enero, el fiscal deberá declarar como investigado después de que el juez Ángel Hurtado considerara probada su presunta participación en la filtración de información sobre la investigación abierta contra González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso.
Esta investigación está marcada por el borrado de mensajes de los móviles de García Ortiz, aludiendo a que es una protocolo habitual. Si bien, el Supremo ha solicitado una copia de esa normativa interna en la que se amparó para justificar que la UCO no encontrara mensajes. También ha pedido ayuda a Google y WhatsApp para recuperarlos y que la propia fiscalía aclare si los móviles del fiscal han sido formateados y cuántas veces ha cambiado de terminal.
El Congreso ha aprobado el suplicatorio contra Ábalos
Por último, el Congreso ha aprobado el suplicatorio que permite al Supremo poder investigar a Ábalos por su vinculación con el caso Koldo. De esta manera, el exministro de Transportes ya no tiene inmunidad parlamentaria y será investigado por delitos de tráfico de influencias, integración en organización criminal, cohecho y malversación a partir del jueves o viernes, cuando llegue la conformación al Supremo.