Se trata de los tres agentes identificados hasta ahora por esas amenazas, denunciadas ante el Cuerpo el pasado 13 de noviembre por uno de los cien agentes que integraban un 'chat' de policías que se creó hace dos años para abordar problemas laborales. El agente denunció ante la Unidad de Gestión de la Diversidad de la Policía Municipal, a la que mostró el contenido de los mensajes al entender que algunos constituían un delito de odio.
Luego acudió al juzgado de guardia para denunciar que, a raíz de esa denuncia, había recibido amenazas de varios integrantes del 'chat', por lo que necesitaba protección, aunque sin interponer denuncia o querella por delito de odio. Entonces el juez solicitó identificar a los amenazadores para luego valorar si se ponía protección al denunciante.
Pocos días después el Ayuntamiento identificó a tres agentes como autores de esas amenazas, que son los ahora citados, y además solicitó personarse en el caso porque "se vierten amenazas directas a un agente de Policía Municipal, por protección a la ciudadanía ante posibles delitos de odio, por posible falta grave a una superior -la alcaldesa- y por la mala imagen que se está generando del cuerpo de Policía Municipal y del Ayuntamiento de Madrid".
También suspendió temporalmente a estos agentes y les aplicó medidas cautelares como la retirada del arma y la credencial reglamentaria. Mañana los tres agentes implicados, que están de baja médica, tendrán que declarar ante el juez por las presuntas amenazas vertidas contra su compañero, que es el único delito que el magistrado tiene sobre la mesa ahora.