Felipe VI y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presidirán este lunes en Madrid el acto conmemorativo del 40 aniversario de la entrada de España en la OTAN, preludio de la cumbre de los mandatarios de los 30 países aliados que acogerá la capital española a finales de junio.
El Teatro Real va a ser el escenario del evento, en el que va a participar el secretario general de la OTAN, Jeans Stoltenberg, sus antecesores en el cargo, entre ellos, el exministro Javier Solana, y los expresidentes del Gobierno, así como los representantes del conjunto de las naciones aliadas que componen el Consejo Atlántico.
En total unos 300 invitados, con la presencia de la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, mientras que no va a haber ningún miembro del Gobierno de Unidas Podemos, críticos con que Madrid acoja la cumbre de finales de junio por su carácter militarista.
Está previsto que también asista Ihor Zhovkva, consejero político y director adjunto del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, de visita esta semana en Madrid.
Tras el acto institucional habrá un almuerzo ofrecido por los reyes a las principales autoridades en el Palacio Real.
Realce a la celebración porque fue "un hito fundamental para comprender la España de hoy"
El Gobierno ha querido dar el máximo realce a la celebración de los 40 años en la Alianza Atlántica al considerar que aquel paso fue "un hito fundamental para comprender la España de hoy" por la estabilidad que aportó a la democracia, según fuentes del Ejecutivo.
La cita del Teatro Real coincide con la fecha en la que España, bajo el Gobierno de Leopoldo Calvo Sotelo, se convirtió en el miembro número 16 del pacto militar fundado en 1949 por Estados Unidos, Canadá y una decena de países europeos.
La llegada al poder de Felipe González en octubre de ese año, tras arrasar en las urnas, dio pie a un periodo de reflexión sobre la entrada de España en la Alianza Atlántica, que desembocó en la suspensión de las conversaciones sobre la integración militar española en la OTAN.
El 52% de los españoles respaldó la adhesión de España a la OTAN
En el referéndum celebrado el 12 de marzo de 1986 los españoles dieron su respaldo definitivo a la adhesión, con el 52,5% de apoyo, frente a un 39,8% que se pronunció en contra.
Según la última encuesta publicada por la Alianza Atlántica el pasado mes de febrero, coincidiendo con el comienzo de la guerra en Ucrania, siete de cada diez españoles apoyan la permanencia en la organización.
El respaldo que se expresó en la consulta popular hizo que España iniciara su participación en todas las áreas de trabajo de la OTAN, con excepción de la estructura militar integrada, a la que no se incorporaría plenamente hasta 1999.
Desde que participara en la primera misión de la Alianza en 1992, España ha desplegado unos 125.000 militares en las 22 operaciones en las que ha intervenido, de las que siete siguen en marcha en la actualidad, entre ellas, en Irak, Turquía y el Báltico.
Según el Gobierno, en las cuatro décadas de pertenencia al pacto militar España ha consolidado su imagen de "aliado comprometido en lo político, en lo estratégico y en lo operativo".
El acto conmemorativo de este lunes será la antesala de la cumbre de la OTAN de Madrid del 29 y 30 de junio, la segunda que organiza España tras la de 1997, y que viene marcada por la guerra en Ucrania.
En ella participarán los líderes de los países miembros de la organización, por lo que será la primera ocasión en la que Joe Biden viaje a Madrid desde que llegó a la Casa Blanca.
La pretensión del Gobierno es que Finlandia y Suecia puedan participar en la cumbre como candidatos formales a ingresar en la OTAN, para lo que es preciso que firmen antes su protocolo de adhesión, aunque siguen contando con la postura en contra de Turquía, uno de los pilares de la Alianza.
Con la invasión rusa de Ucrania como telón de fondo, el objetivo que se han marcado los aliados en la cita de Madrid es renovar el concepto estratégico de la OTAN para la próxima década.
España quiere que se incluya como amenaza la región africana del Sahel, la franja de África que incluye países como Mali, Níger o Chad por su inestabilidad política y social, la presencia de grupos terroristas y el impacto migratorio y alimentario que genera el cambio climático.