"Lo echo de menos ya y estoy seguro de que lo voy a echar de menos y voy a echar de menos esa conversación interrumpida", ha dicho con emoción en declaraciones en el Congreso, tras visitar su capilla ardiente.
Felipe González ha recordado que él tenía 35 años y Rubalcaba 25 cuando se conocieron y que desde entonces, como diría el escritor colombiano Gabriel García Márquez, habían mantenido una "conversación que la muerte ha roto bruscamente".
La última vez que hablaron fue hace una semana, a propósito de la visita a República Dominicana que Rubalcaba empezaba mañana y donde iba a pronunciar "un par de conferencias".
Hablaron también del proceso de paz en Colombia y de la "preocupación" al respecto "de algunos de los que habían mediado para acabar con el terrorismo de ETA", ha apuntado el expresidente.
Tras señalar que Rubalcaba era el "político con más capacidad e inteligencia de la política española" y que era capaz de trabajar 16 y 17 de horas, se ha mostrado convencido que todos los elogios que ha recibido desde su fallecimiento eran merecidos y sus palabras han sido acogidas con aplausos en el patio del Congreso.