ADVIERTE QUE EL ANONIMATO FAVORECE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER

El fiscal general apuesta por perseguir a los acosadores anónimos en las redes sociales

El fiscal general del Estado, Julián Sánchez Melgar, ha advertido de que el anonimato en las redes sociales favorece la violencia contra la mujer, por lo que ha apostado por perseguir penalmente a los hombres que se esconden en perfiles anónimos para acosar a las mujeres en Internet.

ondacero.es

Madrid |

El fiscal general del Estado, Julián Sánchez Melgar | EFE

Esta es una de las líneas de actuación que ha expuesto Sánchez Melgar ante la Comisión de Justicia del Congreso, donde ha presentado la memoria anual de la Fiscalía General de 2015 y 2016. Solo en este último año murieron 52 mujeres y 28 menores se quedaron huérfanos, ha recordado.

Tras lamentar este "macabro cómputo", el fiscal general ha propuesto ampliar el concepto de violencia de genero y en prestar especial atención a las actuaciones, comentarios y amenazas que se vierten contra las mujeres en las redes sociales. En la víspera del Día Internacional de la Mujer, Melgar ha pedido "una correcta regulación del empleo de las redes sociales como medio de comisión de estos delitos, tipificando las conductas que se amparan en el anonimato en las redes sociales que favorecen la violencia contra la mujer", en alusión a los acosadores que se esconden en perfiles anónimos.

Y ha pedido "reconsiderar el mecanismo del artículo 416 de la ley de Enjuiciamiento Criminal para que deje de procurar situaciones de impunidad en casos de silencio impuesto a la víctima". Dicho artículo señala que están dispensados de la obligación de declarar el cónyuge y otros parientes cercanos, y añade que en caso de que lo hagan el juez instructor advertirá al testigo que no tiene obligación de declarar en contra del procesado; pero que puede hacer las manifestaciones que considere oportunas.

Además, el fiscal general ha señalado que el Ministerio Público llevará a cabo una serie de actuaciones para potenciar la labor de apoyo a las víctimas, mediante "un trato personalizado y de especial atención a las mujeres", así como para reforzar los recursos y medios disponibles para perseguir estos delitos.