Francia afirma que no negociará con ETA la entrega de las armas
El ministro francés del Interior, Bruno Le Roux, aseguró que no negociará con la banda terrorista ETA la entrega de armas y señaló que "solo la autoridad judicial está habilitada" para hacerse con el arsenal.
"La única solución para un desarme respetuoso con la ley es señalar la localización de esas armas a las autoridades", indicó Le Roux en un comunicado, en respuesta al anuncio de que ETA puede informar sobre el emplazamiento de sus zulos el próximo 8 de abril.
"Si ETA quiere proceder a su disolución y someterse a la ley, le corresponde entregar todas sus armas a ambos lados de la frontera", señaló.
El ministro respondió así al dirigente del movimiento ecologista y social "Bizi!" Jean-Noël Etcheverry, "Txetx", que pidió a las autoridades de Francia y España negociar la entrega de las armas, la mayor parte de ellas escondidas en territorio francés.
Le Roux aseguró que "esas armas están en manos de una organización terrorista, muchos de cuyos miembros están perseguidos o buscados por la justicia en el marco de procesos criminales en Francia o en España".
"Esas armas y explosivos", prosiguió el ministro, "constituyen elementos de prueba en investigaciones en curso".
El responsable francés de Interior avisó a quienes intenten intermediar en el desarme de que "toda manipulación de esas pruebas puede entorpecer la acción de la justicia y el esclarecimiento de la verdad".
Etcheverry aseguró en declaraciones recogidas ayer por el vespertino francés "Le Monde" que ETA había confiado a su organización y a otros negociadores "la responsabilidad del desarme de su arsenal".
"En la noche del 8 de abril, ETA estará totalmente desarmada", dijo al rotativo el dirigente ecologista, próximo de círculos independentistas.
Los negociadores pretendían que fuera el Estado francés el que se hiciera cargo del armamento en una operación supervisada por "observadores imparciales".
"No queremos que (las armas) puedan servir al Estado español o a cualquier milicia que rechace todo escenario de desarme organizado por la sociedad civil", señaló Etcheverry.
Este dirigente había sido detenido el pasado 16 de diciembre junto a otros cuatro representantes asociativos en la localidad vascofrancesa de Louhossoa junto a un depósito de armas de ETA, que, según afirmaron, pretendían inutilizar pero no destruir.
Se estima que en las diez cajas halladas en aquella ocasión el grupo terrorista guardaba el 15 % del arsenal que todavía mantiene bajo su custodia en zulos en la naturaleza y en domicilios particulares, sobre todo en el País Vasco francés.