El Gobierno de España ha anunciado que invertirá 30 millones de euros en la resignificación del Valle de Cuelgamuros. De la partida, 4 millones irán para la organización y la presentación de un concurso de ideas internacional, y los 26 millones restantes para la resignificación, la museografía y la construcción de un museo en la explanada de la basílica.
Así lo han confirmado fuentes ministeriales, las mismas que han apuntado que se trata de "un lugar de memoria histórica complicado", por lo que tienen la intención de que su resignificación sea llevada a cabo por un equipo multidisciplinar que aseguren "los principios y valores constitucionales".
Concurso internacional
En los próximos días se presentará el concurso internacional con sus bases, evaluado por un jurado independiente compuesto por prestigiosos profesionales, además de personalidades de la Iglesia, como el delegado de Liturgia del Arzobispado de Madrid, Daniel Alberto Escobar Portillo. A este concurso se podrán presentar profesionales de disciplinas como arquitectura, historia, paisajística, arte o museística y miembros de la propia Iglesia, entre otros, siempre y cuando cumplan las bases estipuladas en el concurso.
El concurso repartirá premios de en torno a 60.000 euros a cada uno de los 10 finalistas, además de otros 60.500 euros para el ganador. Una vez finalizada la prueba, se evaluará el proyecto y se licitarán las obras. Estas tiene su comienzo previsto para finales de 2026.
Dentro de los principales cambios que experimentará el antiguamente llamado Valle de los Caídos, el principal será la construcción de un museo con centro de interpretaciones. Para el levantamiento de este, el Gobierno se ha fijado en otros lugares de recuerdo como el Monumento a las Víctimas del Holocausto en Berlín o el Monumento por la Paz y la Justicia de Montgomery. En ningún caso, según fuentes del Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática, se había previsto el cambio o la desaparición de la cruz, uno de los principales elementos identificatorios del lugar.
Continuidad de la comunidad benedictina
Desde el Ministerio de Presidencia, Justicia y Relación con las Cortes se ha deslizado que todo el plan se ha acordado con el visto bueno de la Iglesia Católica, ya que "no se pueden tomar decisiones unilaterales en un lugar de culto" sin la institución correspondiente. Además, califican de muy positivas las reuniones llevadas a cabo con el Arzobispado de Madrid y con el Vaticano.
Las mismas fuentes han asegurado que no habido problema al asegurar la continuidad de la comunidad benedictina residente en el valle y que el relevo del prior Santiago Cantera ha facilitado los acuerdos.