De esta manera, ha respondido el Gobierno a la llamada que Torra ha realizado a Sánchez, aunque no ha habido conversación entre ambos dirigentes, han informado fuentes de Moncloa.
Según han explicado fuentes de la Generalitat, desde Moncloa han dicho que Sánchez no podía ponerse por estar reunido y que a lo largo de la tarde se pondrían en contacto con Torra.
Mientras, el Ejecutivo ha reclamado también a Torra "reconocer el trabajo de las FCSE (fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado) y Mossos, y solidarizarse con los policías heridos" y le ha recordado que el Gobierno "siempre ha estado a favor de dialogar dentro de la
ley", es decir con la premisa de: "Primero Ley y luego diálogo".
En su respuesta, el Gobierno advierte de que, "tal y como le ha dicho el líder del PSC, Miquel Iceta", para que el diálogo sea efectivo Torra "debería reconocer a la otra parte de catalanes, que no son independentistas" que le piden reconstruir la convivencia dañada por el independentismo y "últimamente, aún más dañada por el independentismo violento".
Por último, el Gobierno reitera que el problema de Cataluña "no es la independencia, que no se producirá, porque no es legal, ni la quiere la mayoría de catalanes, sino la convivencia". Y avisa a Torra de que "su propuesta de referéndum no la quiere ni la mayoría de catalanes ni, al parecer, la mayoría de su propio Govern".
Por lo que, para restaurar la convivencia, "lo primero es condenar la violencia, algo que no ha hecho el señor Torra", concluye el Ejecutivo en funciones. En una comparecencia tras presidir el gabinete de seguimiento de los disturbios en Cataluña, Torra ha instado a Sánchez, a fijar ya la fecha de una reunión para abrir de "manera inmediata el diálogo y la negociación" para buscar una solución política a la situación de Cataluña porque su causa es "imparable". Además, ha llamado a la protesta pacífica porque "la violencia no
es nuestra bandera", ha afirmado.