El Gobierno reúne al Pacto Antiterrorista para mostrar unidad y adelanta que no cambiará la política penitenciaria
El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, convocará la semana próxima al Pacto Antiterrorista para que se reúna y analice la situación tras el anuncio de ETA de poner fin "a toda su trayectoria". Se trata de escenificar la unidad de las fuerzas políticas y dejar claro que no se cambiará la política penitenciaria, según han señalado fuentes de Moncloa.
El propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha sido el que ha anunciado --en su mensaje institucional desde el Palacio de la Moncloa-- esta reunión del pacto antiterrorista en los próximos días. De hecho, ha reivindicado la utilidad de ese pacto frente a ETA porque ha simbolizado la unidad de la democracia contra el terrorismo.
"Fue nuestra respuesta firme para actuar como nación en momentos de intenso dolor", ha dicho el presidente del Gobierno, para quien ese pacto tiene que ser también ahora ante el final de ETA un "elemento de unidad" de quienes creen en la justicia y la democracia.
El pacto nació en el año 2000 como una herramienta de unidad política frente al terrorismo de ETA, pero ha incluido la lucha contra el terrorismo yihadista desde su irrupción en España. Precisamente, sus últimas reuniones han servido para informar y coordinar medidas contra este terrorismo, en especial tras los atentados de Barcelona y Cambrils.
Conscientes de las diferencias
Fuentes de Moncloa han señalado que el pacto antiterrorista se convoca para "escenificar unidad", si bien han precisado que "unidad no es unanimidad". En este sentido, las fuentes consultadas han admitido que son conscientes de las diferencias que hay entre los distintos partidos pero consideran que se puede dar una "respuesta común". De hecho, no creen que el consenso sea ahora más difícil que antes.
Además, fuentes del Ejecutivo han indicado que la política penitenciaria ha sido un instrumento fundamental en la victoria de la democracia sobre ETA y han agregado que no se plantean cambiarlo porque "sin cambiarlo, ETA está rendida".
Sin embargo, las diferencias sobre este asunto pueden estar encima de la mesa en esa reunión del pacto antiterrorista. Tanto el PSOE como Podemos defienden el acercamiento de los presos de ETA a sus lugares de origen.
PSOE y Podemos versus PP y Ciudadanos
De los grandes partidos del Congreso, sólo Ciudadanos defiende la misma posición del PP y del Gobierno, mantener la dispersión de los presos de ETA mientras "haya asesinos sueltos" y para que la organización terrorista no saque réditos del "paripé" en torno a su disolución.
Postura diferente mantienen los socialistas, para los que es necesario acercar a los presos etarras aunque sin cambiar los requisitos actuales para facilitar el acceso de los miembros de la banda terrorista encarcelados a beneficios penitenciarios, según explicó este mismo jueves el 'exlehendakari' y secretario de Política Federal del partido, Patxi López.
El dirigente vasco precisó que los socialistas llevan años defendiendo "otra política penitenciaria" que termine con la dispersión, dado que, bajo su punto de vista, sólo sirve para que la banda y su entorno tengan elementos para jugar a la "victimización".
Podemos, que está como observador en el pacto antiterrorista, sostiene también el acercamiento de los presos de ETA a sus lugares de origen, pero además la transferencia a Euskadi de la política penitenciaria.
Por su parte, los nacionalistas vascos también defienden acercar presos de ETA al País Vasco. El lehendakari, Íñigo Urkullu, dijo hace unos días en el diario 'El País' que se trata de una demanda mayoritaria de la sociedad vasca y reveló que Mariano Rajoy es "sensible" a un cambio en la política penitenciaria.
Sin embargo, el Ejecutivo ha rechazado esa posibilidad de acercar presos. El propio Rajoy ha garantizado además que ETA no obtendrá ningún beneficio por su disolución y no encontrará "ningún resquicio para la impunidad" tras sus crímenes.