Aseguran que se encontraron con "grupos organizados de ciudadanos" que agredieron a los agentes con empujones, patadas o lanzamiento de objetos, como piedras y vallas, para impedir que entraran en los centros e impidieran la consulta ilegal, tal y como ordenaba el mandato de la Justicia.
"Trataban de impedir por todos los medios que nosotros accediéramos a los locales y evidentemente que intentáramos garantizar la seguridad colectiva", ha dicho uno de los testigos.
También ha afirmado que llegó un momento en que la situación fue "imposible" de mantener porque "entre las agresiones que estábamos recibiendo, había que emplear la mínima fuerza imprescindible para poder realizar el cometido que teníamos encomendado".