El documento de todos los grupos menos los de Junts pel Sí y la CUP se ha dado a conocer esta tarde y representa un posicionamiento conjunto ante la intención de las formaciones independentistas de hacer valer su mayoría absoluta en todos los órganos del Parlament.
Los grupos no independentistas consideran, por el contrario, que deberían primar los criterios de proporcionalidad para designar la composición de la Mesa, lo que haría posible que en esta última estuviera representado el PP en lugar de la CUP, o que Junts pel Sí no tuviera cuatro representantes en lugar de los tres que le corresponderían si la CUP le cede sus votos.
El intento de estos grupos, sin embargo, choca con la voluntad ya expresada tanto por Junts pel Sí como por la CUP de garantizar una mayoría independentista en la Mesa y en los demás órganos del Parlament.
Según los grupos no independentistas, "los principios de proporcionalidad y de representatividad son la auténtica fuente primaria del derecho parlamentario" y deberían ser preservados para que las minorías políticas puedan expresar su voz.
Invocan, en este sentido, tanto el Estatut como el reglamento de la cámara y la Constitución española, y reclaman que el cargo de "jefe de la oposición" -en este caso Inés Arrimadas (Ciutadans)- sea "visible" en el hemiciclo "de acuerdo con su relevancia política e institucional", en una clara alusión al hecho de que Junts pel Sí pretenda situarlo en la parte superior del hemiciclo.
Para los grupos de la oposición, no tener en cuenta estos criterios "puede comportar una grave vulneración al derecho de acceso a los cargos públicos en condiciones de igualdad, reconocido constitucionalmente, así como incumplir el principio de pluralismo político reconocido estatutariamente".