EFE
Madrid | 26.09.2019 13:39 (Publicado 26.09.2019 13:34)
Lo ha avanzado este jueves el doctor Manuel Ramírez, director de la Unidad de Terapias Avanzadas del Niño Jesús en una rueda de prensa con motivo de la primera reunión de expertos que organiza este hospital, con el objetivo de conocer las iniciativas terapéuticas más novedosas dirigidas a niños y adolescentes, a través de los expertos que las están desarrollando.
La CART es un tratamiento que consiste en extraer sangre del paciente mediante una técnica que permite obtener linfocitos T, un tipo de células del sistema inmunitario, que se modifican en el laboratorio para que sean capaces de destruir las células cancerígenas.
El doctor Ramírez ha explicado que en el Niño Jesús se van a tratar niños de toda España y ha señalado que de los 60-70 pacientes con leucemia linfoblástica que tienen recaídas, un porcentaje importante recibirán esa terapia en este centro.
En la jornada participa el doctor Michael Jensen, responsable del programa de células CART Innovadoras para cáncer infantil en el Hospital Seattle Childrens, cuyo equipo tiene abiertos ensayos clínicos de diseño propio con esta terapia. En cinco ensayos realizados durante cinco años en niños con leucemia linfoblástica han visto que en nueve de cada diez casos la enfermedad ha remitido, aunque, ha precisado, que "aun no pueden afirmar que somos capaces de curarlos".
Este experto, además, lidera la iniciativa Cureworks, una colaboración internacional de hospitales infantiles enfocada a expandir los tratamientos para que tengan acceso pacientes de todo el mundo, ya que entiende que la industria no va a atender todas las necesidades de la oncología infantil porque no es rentable.
El objetivo último, ha subrayado el doctor Jensen, es curar sin utilizar quimioterapia ni radiorerapia, una estrategia que ya está "desfasada", aunque ha dicho no poder decir cuándo se va a lograr.
En el Niño Jesús, además, ha desarrollado la primera experiencia mundial en el tratamiento con terapia génica de pacientes con anemia de franconi, una enfermedad que afecta a unos 150 niños en España, cuyo pronóstico es mortal si no se trata. La doctora Paula Río, responsable de este proyecto, ha explicado que los pacientes que se han tratado con esta terapia no son pacientes a trasplante al no tener un donante compatible, que representan el 75 % de todos los afectados.